Somos basura

 Por Iñigo Jiménez

El otro día, en el cuarto de las basuras donde vivo, observé que algún vecino había optado por ahorrarse el viaje al contenedor de papel, que está a pocos metros del edificio, y había dejado una gran cantidad de cajas de cartón en dicho cuarto, hecho que está expresamente prohibido por las normas de la comunidad.

Identificar al vecino “infractor” fue bastante fácil. En varias de las cajas estaban puestas las etiquetas del servicio de mensajería que las había enviado. En ellas venía el nombre y apellidos del destinatario, el piso y letra, e incluso su DNI y su número de teléfono.

Yo, desde hace muchísimo tiempo, tengo la sana costumbre en casa de eliminar, en cualquier documento, caja, carta u objeto que tire a la papelera o al contenedor de papel cualquier dato que pudiera comprometer seriamente mi privacidad.

No somos realmente conscientes de la información que puede sacar la gente a través de nuestros residuos así que, por favor, no se lo pongamos fácil.

Es muy fácil averiguar cosas de la gente simplemente mirando su basura:

• Si vemos pañales, botes de potitos o toallitas estamos ante alguien que tiene niños pequeños.
• Si vemos que hay muchos restos de comida preparada, botellas de vino, comida para animales, revistas de viajes para singles o productos cosméticos, posiblemente estemos ante una persona soltera.
• Si vemos que hay restos de palomitas, envoltorios de chocolates o revistas de cine podríamos encontrarnos con gente aficionada al séptimo arte.

Toda la información que se obtenga a través de estos medios puede ser utilizada fácilmente para realizar usurpaciones de identidad o para cometer fraudes utilizando ingeniería social.

Y lo que decimos para la basura, trasládalo a las aplicaciones móviles o a las redes sociales. Cuando hagas uso de las mismas trata de dejar el menor rastro posible para evitar filtraciones no deseadas de datos personales.

P.D.: Vecino (o más bien vecina del XºX Portal X) si lees este artículo no vuelvas a dejar las cajas de cartón en el cuarto de la basura, déjalas en el contenedor que no cuesta mucho.