15 diciembre 2017
La Abogacía reafirma su compromiso y lucha por la igualdad en la entrega de los Premios Derechos Humanos 2017
“Derechos Humanos=Derechos en Igualdad”. Bajo este lema, el Consejo General de la Abogacía mostró su firme compromiso con la igualdad de hombres y mujeres en todos los ámbitos de la sociedad, como quedó demostrado en la entrega de los Premios Derechos Humanos 2017, que tuvieron lugar durante la Conferencia Anual de la Abogacía, dedicados este año de forma extraordinaria a la igualdad de género. En la categoría de “Personas” se premió a la atleta Kathrine Switzer, primera mujer en correr con dorsal el maratón de Boston antes de que se reconociera el derecho de las mujeres a hacerlo y que con su gesta y su trabajo posterior ha conseguido grandes hitos para el deporte femenino; en la categoría de “Instituciones”, el Premio recayó en el Proyecto Capre de los Salesianos de Medellín, que tiene como objetivo principal la atención y apoyo a adolescentes y jóvenes desvinculados de grupos armados organizados al margen de la ley y bandas criminales (entre 14 y 18 años, provenientes de zonas rurales y sobre todo afro descendientes e indígenas), con especial énfasis en la atención a mujeres; en la categoría de “Medios de Comunicación” a la periodista nigeriana Chika Oduah, que ha recorrido las zonas del país africano controladas por Boko Haram para conocer el verdadero alcance de sus secuestros y amenazas a las niñas de la región, y denuncia con su trabajo el machismo de la sociedad de su país; y el Premio “Nacho de la Mata” fue a parar este año a Albert Parés, abogado social defensor de los derechos de la infancia y en especial de los menores no acompañados migrantes y creador de la Asociación Noves Vies, desde donde tratan de mejorar la situación de los menores inmigrantes no acompañados, que tras cumplir la mayoría de edad se ven abandonados y excluidos por la administración.
Este año la Conferencia Anual estuvo conducida por Rubén Cobos y Cristina Cobaleda, miembros de la compañía “Teatro Yeses”, formado por reclusas del Centro Penitenciario Madrid 1 Mujeres y Premio Max de Teatro 2017, que a través de dos actuaciones al inicio y al final del acto -ambas con el tema de la igualdad de género como argumento-, dieron paso a los galardonados que recibieron el Premio de manos de las autoridades presentes en la ceremonia: la presidenta del Consejo General de la Abogacía, Victoria Ortega; el ministro de Justicia, Rafael Catalá; el fiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar; la secretaria de Estado de Justicia, Carmen Sánchez-Cortés; el defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán; la vocal del CGPJ y presidenta de su comisión de Igualdad Clara Martínez de Careaga; la consejera de Estado Amelia Valcárcel o el presidente de honor de la Fundación Abogacía y anterior presidente del Consejo General de la Abogacía, Carlos Carnicer.
Más de 300 asistentes abarrotaron el anfiteatro Gabriela Mistral de la madrileña Casa de América, entre los que se dieron cita representantes de la Justicia y la política, como el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro Miranda; Juan Carlos Campo Moreno, portavoz de Justicia del PSOE en el Congreso de los Diputados; María Jesús Moro, portavoz del Partido Popular en la Comisión de Justicia del Congreso; el secretario general del CGPJ Joaquín Vives de la Cortada; los vocales del CGPJ Álvaro Cuesta y Pilar Sepúlveda; el presidente del TSJ de Madrid Francisco Javier Vieira; el juez decano de Madrid Antonio Viejo Llorente; el Fiscal de Sala Coordinador de Menores Javier Huete Nogueras; la fiscal adscrita a la Sala de Violencia Contra la Mujer Teresa Peramato; la jefa de la Fiscalía de Violencia sobre la Mujer María Pilar Martín Nájera; los magistrados del Supremo José Manuel Bandrés, José María del Riego y Antonio del Moral o María Luisa Cava de Llano, ex defensora del Pueblo.
En las paredes de la sala, además, estuvieron expuestos los 11 grafitis elaborados en la jornada de arte urbano organizada el 12 de diciembre, y que se subastarán en enero.
Reconocimiento a la dedicación por los derechos de los menores no acompañados
El Premio Nacho de la Mata recayó este año en el abogado barcelonés Albert Parés, por su trabajo, a través de la Asociación Noves Vies, con los menores no acompañados, especialmente cuando éstos alcanzan la mayoría de edad y quedan especialmente desamparados.
Parés recogió el premio de manos de la consejera de Estado Amelia Valcárcel y el Fiscal General del Estado Julián Sánchez Melgar y se mostró especialmente emocionado por haber sido galardonado con un premio que lleva el nombre de Nacho de la Mata, con quien compartió amistad y trabajo, y del que aseguró haber aprendido grandes lecciones, entre ellas, que “no todos los abogados están preparados para defender a menores”. Parés denunció que “en la actualidad, en todos los procedimientos de determinación de edad no hay presencia de abogado, y esto es muy grave”. Asimismo, pidió a los Colegios de Abogados que “los abogados de oficio estén especializados, porque estamos ejerciendo un servicio público y al igual que exigimos los mejores médicos de la sanidad pública, también hay que exigir tener a los mejores abogados en la Justicia Gratuita”.
En cuestión de menores no acompañados, “España no cumple con las resoluciones del Comité de los Derechos del Niño, a ver cuando empezamos a darnos cuenta de que los convenios internacionales están para cumplirlos” y comienzan a cambiar las cosas para que estos chavales “puedan trabajar e integrarse en la sociedad”. “Buscar Justicia es una manera de amar. Y como dijo San Juan de la Cruz, ‘al atardecer seremos juzgados por el amor’”, concluyó.
Por la igualdad y la liberación de la mujer a través del deporte
El Premio a Kathrine Switzer, otorgado por su lucha incansable por la igualdad en el deporte desde que fuera la primera mujer en cruzar con un dorsal la línea de meta del maratón de Boston en 1967 –a pesar de que los organizadores de la carrera quisieron sacarla de la competición a empujones, una foto que ha quedado para la historia de la conquista del deporte femenino- lo recogió en su lugar Carmen Valero, otro icono del deporte para las mujeres, tras ser dos veces consecutivas campeona del mundo de campo a través, en 1976 y 1977, y la primera atleta española en competir en unos Juegos Olímpicos, en Montreal 1976, donde disputó los 800 y los 1.500 metros.
Valero, que recibió el premio de manos de la vocal de Igualdad del CGPJ, Clara Martínez de Careaga y el Defensor del Pueblo en funciones, Francisco Fernández Marugán, consideró que “las mujeres lo hemos pasado mal en el mundo del deporte, siempre pidiendo permiso para poder participar en competiciones. Hemos tenido que demostrar día a día que podemos hacer lo mismo”, y pidió que esta tarea “sea una labor de todas” para seguir luchando por la igualdad que aún no es una realidad.
Kathrine Switzer no pudo asistir a la ceremonia por un asunto personal, pero dejó grabado vídeo, que pudieron ver todos los asistentes a la Conferencia, en el que agradeció la concesión del premio y aseguró que tras su gesta y después de conseguir también que los Juegos Olímpicos admitieran el maratón femenino como prueba oficial, decidió crear la Fundación 261Fearless, “que va país por país, comunidad a comunidad, llegando directamente a las mujeres para darles las herramientas necesarias para sentirse bien con ellas mismas, sin prejuicios, practicando la carrera o la caminata, en grupos de mujeres que hablan entre ellas. Gracias a esto, estamos cambiando la vida de muchas mujeres”.
“Creo que cualquier persona en el mundo puede merecer un Premio de Derechos Humanos si coge una injusticia y la corrige; si enseña a cualquier niño o niña que, si se les da la oportunidad, pueden conseguir lo imposible; si consigue aumentar el autoestima de una mujer y la anima a seguir adelante, no solo a través del deporte, sino en todos los aspectos de la vida… Lo que ocurre con el deporte es que a través de él se puede llegar a la gente de una forma muy fácil y agradable, que hace sentir muy bien consigo mismos a los que lo practican”, aseguró en la grabación.
“Quisiera recordar una frase que mi padre me decía siempre desde que era pequeña: cuando inicias algo, tienes que aceptar la responsabilidad de terminarlo. Cuando decidí acabar esa carrera, no sabía que 50 años después estaría recibiendo este Premio que me concedéis. Y mirando hacia el futuro, os pido, mientras os paso el testigo, que sigáis cambiando vidas en todo el mundo. Especialmente las de las mujeres”, concluyó Switzer.
Poner el foco sobre los derechos de la mujer africana
En la categoría de “Medios de Comunicación”, la premiada fue la periodista nigeriana Chika Oduah, por su labor periodística en su país dando a conocer las vulneraciones de derechos humanos a las mujeres, incluyendo las acciones del grupo terrorista Boko Haram y sus secuestros de niños. Recibió el premio de manos de la secretaria de Estado de Justicia, Carmen Sánchez-Cortés y el anterior presidente del Consejo General de la Abogacía y presidente de honor de la Fundación Abogacía, Carlos Carnicer.
Durante su intervención Oduah relató el impacto que le supuso llegar a Nigeria desde Estados Unidos, donde se había criado, y comprobar “como es la relación entre hombres y mujeres, como algunos hombres contaban orgullosos que golpeaban a sus mujeres porque tenían que corregirlas, y como se decía que a algunas mujeres les gustaba ser golpeadas porque así demostraban que las querían”. “Me di cuenta de todo el trabajo que había que hacer, pero no solo en Nigeria o en África, sino en todo el mundo”.
En cuanto a Boko Haram y el secuestro de 276 niñas en 2014 que impactó a todo el mundo, aseguró que “no era la primera vez que secuestraban chicas, pero sí la primera vez que se llevaban a tantas a la vez. Y esto fue posible porque en ésta parte del mundo las niñas apenas tienen valor. Y Boko Haram no quiere que las chicas sean educadas ni que tengan derechos”. Sin embargo, lanzó un mensaje de esperanza y relató que “algunas niñas consiguieron escapar, y ahora viven y estudian en Estados Unidos”. Porque Oduah quiso dejar claro el mensaje de que “África no es solo sufrimiento y violencia. Ocurren cosas maravillosas todos los días, hay mujeres que se levantan cada día contra la violencia, que luchan por sus sueños, y debemos apoyarlas”. Y para ello, es necesario “acabar con los prejuicios en Occidente sobre las mujeres africanas, todas tienen una historia apasionante, solo hay que querer conocerla”.
Convertir a niños soldados en constructores de la paz
Finalmente, el Premio Derechos Humanos en la categoría de “Instituciones” fue a parar al Proyecto Capre de los Salesianos de Medellín, por su labor con niños y niñas soldado de las guerrillas, a los que ayudan a volver a la sociedad, recuperar sus derechos y su confianza y contribuir a la cultura de paz en Colombia. La presidenta del Consejo, Victoria Ortega y el ministro de Justicia, Rafael Catalá fueron los encargados de entregar el premio al padre Rafael Bejarano, director del Proyecto Capre.
Durante su discurso de agradecimiento, señaló que “el proceso de paz es un reto para el pueblo colombiano”, porque “la paz no es solo el final de la violencia armada, es precisamente en este momento cuando se hace más necesario hacer esfuerzos para asegurar el respeto a los Derechos Humanos”.
“El lenguaje de la paz es el de la igualdad y la inclusión”, señaló, al tiempo que desveló una “confesión”: “El programa lleva en marcha 15 años, pero lo hemos tenido en secreto hasta el año pasado, cuando se firmaron los acuerdos de paz. Y solo hace 7 años que incluimos a las mujeres, porque nos dimos cuenta de que eran ellas las que mejor respondían en todos los proyectos que teníamos”. Cuando empezaron a recibir chicas procedentes de las guerrillas, “nos dimos cuenta de que estaban laceradas. No habían sido educadas para desarrollar su personalidad desde lo femenino y tenían comportamientos machistas”. Desde el proyecto, contribuyen a que se recuperen y cierren heridas, y a “construir una cultura y lenguaje de paz”.
“Este premio nos motiva para continuar con nuestro trabajo y nos invita a seguir escribiendo pequeñas líneas de paz en la historia de Colombia”, concluyó.
Reconocimiento a “Yeses”
Al final del acto, que tuvo como protagonistas a las componentes del grupo “Teatro Yeses” y una acertada y humorística actuación sobre un andamio en el escenario, con la igualdad como tema central, la presidenta del Consejo General de la Abogacía, Victoria Ortega, hizo entrega de una placa de reconocimiento a la compañía, recogido por su directora, Elena Cánovas. El premio se entregó no solo por su actuación en esta Conferencia Anual, sino por la labor que llevan desarrollando durante décadas.
Accede al vídeo de agradecimiento de Kathrine Switzer.