10 septiembre 2018
Apertura Año Judicial: la fiscal general del Estado destaca que el 80% de las sentencias en juicios rápidos son de conformidad
- María José Segarra apuesta por una reforma legal que amplíe el ámbito de aplicación de las conformidades
En su discurso durante la apertura del Año Judicial, la fiscal general del Estado, María José Segarra, destacó que en los procedimientos de juicios rápidos, casi el 80% de las sentencias se obtuvieron de conformidad entre fiscales y abogados. El volumen total de acusaciones durante 2017 se ha mantenido en cifras similares, alcanzando las 260.000 (262.319). Sin embargo, casi la mitad de estas acusaciones, unas 120.000 (el 46%) se emiten en procedimientos de juicios rápidos. “Eso supone, a su vez, el 66% (66,3%) del total de diligencias urgentes incoadas, procedimiento en el que se obtiene casi el 80% (79%) de sentencias de conformidad en el propio Juzgado de guardia. Parece lógico pensar, aseguró la fiscal general del Estado- que el fomento de este tipo de soluciones más ágiles a los procedimientos sólo puede provenir de la mano de una reforma legal que amplíe su ámbito de aplicación, a la vista de su notable eficiencia”.
La fiscal general del Estado, María José Segarra, se refirió de forma concreta a la situación en Cataluña durante su primer discurso formal con motivo del acto de apertura del año judicial y, en clara alusión a las pretensiones separatistas, ha afirmado que la Ley “mientras esté en vigor” vincula a todos y “no puede haber excepciones a esta regla porque lo contrario supone la quiebra misma de la propia democracia”.
En presencia del Rey Felipe VI, de la cúpula fiscal y de la judicial representada por el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes; la práctica totalidad de miembros de este órgano y de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, entre numerosos representantes públicos, Segarra ha señalado que “las legítimas aspiraciones políticas de una parte de la sociedad -que en estos días se reivindican especialmente- deben ser encauzadas a través del ordenamiento jurídico”.
También se ha referido a la labor de los fiscales en Cataluña y ha afirmado que será “especialmente firme frente a cualquier intento de condicionar, personal o profesionalmente, a quienes ejercen sus funciones en esta Comunidad”; a los que muestra un apoyo “absolutamente inequívoco”.
Tras hacer un conciso resumen de los datos estadísticos obrantes en la última Memoria de la Fiscalía, con datos de 2017 y que se ha hecho pública este lunes, la fiscal general ha incidido con “tozudez” en al necesidad de “una reforma profunda” del modelo vigente del proceso penal que consista en a ceder a la Fiscalía la fase de investigación con el fin de ofrecer una respuesta más efectiva a la delincuencia.
REFORMA PROCESO PENAL
Por otro lado existiría un juez de instrucción o garantías “que se coloque en el rol que le corresponde desde el plano de su configuración funcional, es decir, una posición de verdadera imparcialidad en el debate contradictorio entre las defensas y las acusaciones” y, finalmente, un juicio de acusación “que implique un filtro real para la adecuada conformación de la relación jurídico-procesal, de manera que el juicio oral pueda recuperar su carácter de elemento central del proceso penal”.
La nueva fiscal general -designada el pasado mes de junio- reconoció que el camino “es largo y no exento de complicaciones” pero ha insistido durante su discurso en que “no puede ser aplazado”.
Como propuestas de futuro también mencionó el Reglamento de la Fiscalía, dirigido a ofrecer a los fiscales nuevas estrategias de formación y un plan de igualdad “que remueva los obstáculos que todavía impiden a muchas mujeres asumir puestos de responsabilidad en condiciones de igualdad de oportunidades”.
DEFENSA DE LA CONSTITUCIÓN
Por su parte, el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, advirtió que cuando la Constitución resulta “golpeada” no puede renunciarse a defenderla y ha mostrado su apoyo a los jueces que reciben “ataques personales”, como ha sido el caso el juez del Tribunal Supremo que ha llevado la instrucción de la causa abierta por el denominado ‘procés’, Pablo Llarena.
Así lo dijo durante su discurso en el Solemne Acto de Apertura del Año Judicial, que se ha centrado en la defensa de la Constitución coincidiendo con en el 40 aniversario de la Constitución Española y en el que ha hecho numerosas referencias -sin mención expresa– a la situación independentista en Cataluña, pendiente de enjuiciamiento en el Tribunal Supremo.
Además, el máximo responsable del órgano de gobierno de los jueces aprovechó su discurso para manifestar su apoyo a los jueces que han recibido “ataques personales alentados no solo desde ciertos sectores sociales, sino, lo que es más preocupante, por algunos responsables políticos”.
Asimismo, el presidente del Tribunal Supremo aludió a las recientes decisiones judiciales de los tribunales alemán y belga sobre Puigdemont y algunos exconsejeros huidos y ha afeado la “grave incertidumbre” por interpretar “de forma unilateral”.
Lesmes recalcó que la Constitución es la “expresión democrática del poder político” y es “permeable” a las transformaciones políticas y sociales. No obstante, ha explicado que no puede ser entendida como “políticamente neutra”, ya que es la que preserva la “convivencia democrática a través de un determinado modelo, querido y definido por el pueblo español, como poder constituyente”.
En este sentido, afirmó que es “irrenunciable” respetarla porque la democracia no puede existir “sin reglas, sin derecho, ni puede construirse sobre andamiajes que dividen a la sociedad”.
POPULISMOS Y “PLANTEAMIENTOS IDENTITARIOS EXCLUYENTES”
Así, continuó advirtiendo del riesgo que suponen para el Estado Constitucional “los movimientos populistas y los planteamientos identitarios excluyentes” y ha asegurado que si en algún momento la norma constitucional resulta “golpeada no puede renunciar a defenderse, pues ello comportaría renunciar a la defensa de sus principios configuradores, y del propio Estado, que es democrático y de Derecho”.
Lesmes hizo hincapié en que en algunas ocasiones de la Historia “la violencia o la astucia -cuando no la combinación de ambas– han permitido desbordar un determinado modelo orgánico de democracia constitucional” dividiendo “profundamente ala sociedad” y alterando “gravemente la convivencia”.
Insistió en que para los “promotores” de estos movimientos “los resultados son siempre inciertos” y que -acogiendo las palabras del historiador francés Alexis de Tocqueville– “la parte más difícil de inventar es el final”. Con todo ello, el presidente del Poder Judicial ha recordado que la Constitución prevé sus propios mecanismos de reforma para satisfacer las reclamaciones de cambio.
DISCURSO DE LA FISCAL GENERAL DEL ESTADO
DISCURSO DEL PRESIDENTE DEL TS Y DEL CGPJ