“El abogado se encuentra en la vanguardia tecnológica contribuyendo a una Justicia más eficaz”

¿Cuáles son los actuales desafíos de CCBE?

Tenemos como principal objetivo el proyecto de cuarta Directiva contra el blanqueo de capitales que acaba de publicarse. Si tenemos en cuenta la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el asunto Michaud y la continua actividad del Grupo de Acción Financiera Internacional, está claro que debemos seguir defendiendo, como abogados, tanto nuestro papel fundamental dentro del ámbito de la justicia como nuestras reglas deontológicas, en particular el secreto profesional, un deber que sirve a los intereses de la administración de justicia así como los de todos los ciudadanos.

CCBE ha seguido la evolución de los países más afectados por la crisis económica, entre los que se encuentra el mío, Grecia. Tememos que la crisis sirva de pretexto para reestructurar a gran escala la profesión de abogado, estableciendo estructuras de negocio alternativas, cuando nada demuestra que la profesión de abogado sea el origen de la crisis. Seguimos de igual modo la estrategia de la Comisión Europea “Justicia para el crecimiento”, que ha publicado informes sobre cómo puede mejorarse la eficiencia de los sistemas jurídicos contribuyendo así al crecimiento global. Supervisamos la posición a escala europea, intervenimos en el plano nacional cuando nuestros miembros lo solicitan y animamos a nuestras Abogacías nacionales a responder a los informes que les afecten.

Seguimos de cerca la eventual creación de una Fiscalía Europea. La Comisión Europea, con el fin de mejorar la transparencia y su imagen pública, se plantea la posibilidad de nombrar un fiscal europeo para investigar y procesar los casos de fraude contra los intereses financieros de la Unión. A pesar de que el objetivo es loable, deberían cumplirse varias condiciones para que pudiéramos dar nuestra aprobación, como un arsenal adecuado de instrumentos jurídicos sobre los derechos de las personas en los procesos penales, que vaya tomando forma lentamente con nuestro apoyo constante y un conjunto de reglas consensuadas sobre la obtención y admisibilidad de pruebas.

Finalmente, trabajamos en varios proyectos financiados por la UE para mejorar la vida laboral de los abogados: el buscador de abogados (“Find-A-Lawyer” / “Encuentra un Abogado”), que permitirá a los ciudadanos encontrar un abogado en otro Estado miembro en función de ciertos criterios tales como el idioma y el área de actividad (en construcción en el portal e-Justicia de la Comisión Europea https://e-justice.europa.eu; su extensión, el buscador de abogados 2 (Find-A-Lawyer 2), que permitirá a los abogados demostrar su identidad en las operaciones electrónicas transnacionales; e-CODEX, gran proyecto intergubernamental de interconexión de los sistemas nacionales de e-Justicia y por último, una nueva Plataforma Europea de Formación, que facilitará a los abogados el poder encontrar en un único sitio web la formación que buscan en toda la UE.

¿A qué problemáticas se enfrentará CCBE en el futuro?

Este año, las instituciones europeas están trabajando en la elaboración de su hoja de ruta europea 2014-2018 en el ámbito de la justicia, la libertad y la seguridad. Nuestro programa de trabajo se basará igualmente en esta hoja de ruta de tal modo que contribuiremos a la actividad de éstas.

Debo añadir que varios de los objetivos del programa de Estocolmo 2010-2014, que está a punto de terminar, han sido alcanzados gracias al apoyo de CCBE: la inclusión de los abogados en la formación judicial europea, el desarrollo del portal e-Justicia mencionado anteriormente, y lo más importante para nosotros, la creación de una Dirección General de Justicia en la Comisión Europea, independiente de la Seguridad Interior con la que ya hemos establecido una red de comunicación y de cooperación especialmente útil.

Seguimos fortaleciendo los lazos de cooperación que hemos ido creando a lo largo de los años con el Tribunal de Justicia de la UE en Luxemburgo y con el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo, con los que mantenemos reuniones periódicas. La  sesión plenaria de CCBE el pasado noviembre tuvo lugar por primera vez en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, tras un evento similar  en 2011 en el Tribunal de Justicia de la UE. Este año, el vicepresidente del TEDH ha sido el ponente principal del seminario sobre Derechos Humanos que ha tenido lugar en Atenas en mayo, durante la celebración de la sesión plenaria.

El año pasado publicamos un Guía de Consejos Prácticos para abogados que quieran plantear cuestiones prejudiciales ante el Tribunal de Justicia de la UE y trabajamos actualmente en la redacción de una publicación equivalente para el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Por otro lado, quiero hacer de la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres una de las prioridades de mi presidencia. Estamos examinando cómo CCBE puede contribuir a esta cuestión en lo que se refiere a los Colegios de Abogados y sus miembros.

Finalmente, estamos preocupados por los efectos de la crisis económica internacional en el trabajo, el bienestar y la dignidad de los abogados, en particular de los jóvenes abogados, no solamente en los países en peor situación, sino en toda Europa.

¿Cuál es, en su opinión, la mayor amenaza y la mayor oportunidad para la profesión de abogado?

En lo que respecta a las amenazas, constatamos que sigue atacándose la independencia de la profesión de abogado desde diferentes flancos. Ya sea la confidencialidad de las comunicaciones abogado-cliente o la autorregulación, varios de los principios de base que sostienen lo que consideramos una sociedad libre, están siendo erosionados como si fueran inconveniencias, privilegios otorgados a los abogados o se tratara de un sistema obsoleto. Estos derechos y principios no deben ser vistos como obstáculos a la recuperación económica o variables a tener en cuenta en la formulación de políticas económicas. Deben garantizarse en tanto que componente esencial de la buena Administración de Justicia y pilar de una sociedad democrática que reposa sobre el Estado de Derecho.

En cuanto a las oportunidades, creo que las tecnologías de la información y de la comunicación deberían utilizarse mucho más para hacer la e-Justicia más efectiva y más agradable para todas las partes involucradas. Quiero demostrar que la profesión de abogado se encuentra en la vanguardia de la tecnología contribuyendo a una justicia más eficaz y más segura. Nuestros proyectos (el buscador de abogados 2, e-CODEX y la nueva Plataforma Europea de Formación) siguen esa línea: las nuevas tecnologías al servicio de los ciudadanos europeos por medio de sus abogados.

¿Cuál sería su único deseo para su presidencia?

Tengo varios deseos pero hay uno que todavía no he mencionado: deseo que los abogados miembros conozcan mejor el trabajo de CCBE y que nos apoyen a través de sus Colegios de Abogados.