El Colegio de Sueca recibe en su 175 Aniversario las medallas de Oro de la Ciudad y al Mérito en la Abogacía

Nacido al amparo de la constitución progresista de 1837, el Colegio de Abogados de Sueca fue fundado el 17 de agosto de 1841, lo que le convierte en una de  las instituciones locales más longeva de la capital de la Ribera Baixa que se ha mantenido viva. Detrás de la misma institución de la ciudad de Valencia, es el colegio más antiguo de la provincia y uno de los más viejos de todo el Estado español.

A través de estos 175 años se ha ido adaptando, tanto a la legislación cambiante como a las necesidades y realidad social concreta de cada momento. Así, desde que fuera aprobada la Constitución Española de 1978 ha quedado patente su firme compromiso en la defensa de la lengua propia y del derecho histórico de los valencianos. Ambos propósitos colectivos quedan reflejados en sus actuales estatutos.

La entidad fue pionera en la lucha por recuperar el Derecho Civil Valenciano. Lo hizo a partir de 1991, coincidiendo con su 150 aniversario, cuando publicaron el facsímil del Formulani de Juristes del segle XVII [Formulario de Juristas del siglo XVII]. El volumen es el manual procesal del que se valieron notarios y abogados que ejercieron en la capital de la Ribera Baixa durante la época foral, tiempos en los que el valenciano era la única lengua oficial. El original de esta joya bibliográfica se conserva en el Archivo Municipal de Sueca.

En mayo de 1992 fue la primera de las instituciones valencianas que reivindicó públicamente, a través del Manifest pel Dret Civil Valencià [Manifiesto por el Derecho Civil Valenciano], la recuperación del histórico Derecho Civil, ajustado a las necesidades actuales. “Estuvo vigente entre nosotros prácticamente durante quinientos años, hasta que se nos arrebató por la fuerza el año 1707”, según apunta el decano emérito Joan-Maria Tamarit. La referencia de Tamarit al Decreto de Nueva Planta, promulgado tras la Guerra de Sucesión, aparece en el prólogo del libro “El Colegio de Abogados de Sueca. Fundació i primers anys de vida” [El Colegio de Abogados de Sueca. Fundación y primeros años de vida], de Carles Tormo. El volumen acaba de ser editado con todo lujo de detalles con motivo de este 175 aniversario. A través de 150 páginas recorre los primeros años de historia de esta institución.

Otro de los principios establecidos en los estatutos del colegio suecano radica en que sus funciones van más allá del orden interno corporativo y que éstas deben trascender a la sociedad de la que forma parte. En este sentido también se pronuncian abiertamente por la defensa del Estado social y democrático de Derecho proclamado en la Constitución, y la promoción y defensa de los Derechos Humanos, según observa Jesús Muñoz, nuevo decano que asumió el cargo el pasado mes de marzo. Especial ha sido la dedicación de los colegiados durante los últimos años asumiendo la defensa ante los tribunales de las personas más desfavorecidas, a través del Servicio de Orientación Jurídica y de Turno de Oficio. Recientemente han constituido el Centro de Mediación y disponen del servicio de asesoramiento a las personas afectadas por la ejecución de hipotecas.

Las cinco primeras poblaciones de su ámbito territorial fueron Albalat de la Ribera, Almussafes, Cullera, Sollana y Sueca, sede del Juzgado de Primera Instancia. Con los años, se sumaría Tavernes de la Valldigna, para incorporarse más tarde Benicull de Xúquer, Benifairó de la Valldigna, Corbera, Favara, Fortaleny, Llaurí, Polinyá de Xúquer, Riola y Simat de la Valldigna, mientras que Almussafes sería asignado al partido judicial de Carlet. En la actualidad abarca los catorce municipios que atienden los seis juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Sueca.

Medalla de Oro de la Ciudad y al Mérito en Abogacía

El colectivo de abogados del colegio de Sueca aprovecha la celebración de este aniversario de su fundación para abordar importantes aspectos del pasado, presente y futuro de la profesión. La primera de estas visiones se analizó el 10 de junio, jornada en la que recibieron la Medalla de Oro de la Ciudad de la mano de la alcaldesa, Raquel Tamarit. La laudatio corrió a cargo de Francesc Gamero, subsecretario de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de la Generalitat Valenciana y miembro del propio colegio.

El decano Jesús Muñoz fue el responsable de inaugurar los actos conmemorativos en el Espai Joan Fuster, centro cultural que acoge el legado del intelectual suecano que en su día ejerció como letrado. Joan-Maria Tamarit, presentó el ya citado libro “El Colegio de Abogados de Sueca. Fundació i primers anys de vida“. Tras la conferencia se procedió a la entrega al colegio de la Medalla al mérito en la Abogacía de la Comunitat Valenciana, por parte de Mariano Durán, presidente del Consejo Valenciano de Colegio de Abogados. Antonio Llácer, decano del colegio de la vecina ciudad de Alzira, también hizo entrega en el mismo acto de una placa conmemorativa.

Ahora preparan dos jornadas más en las que abordarán el presente y futuro de la profesión. Jueces, funcionarios, secretarios judiciales, letrados de la Administración de Justicia, Guardia Civil, fiscales, abogados y procuradores analizarán la situación actual en una amplia mesa redonda prevista para el viernes, 1 de julio.

La perspectiva de futuro será la cuestión que tratarán el próximo otoño. Para ello confían con la intervención de la máxima autoridad de la Abogacía en España, Victoria Ortega, presidenta del Consejo General de la Abogacía Española y de Mariano Durán, presidente del Consejo Valenciano de Colegio de Abogados.