El Colegio de Oviedo edita un libro sobre el cuadro Nuestra Señora de Covadonga, del pintor Francisco Reiter

• El profesor de Historia del Arte de la Universidad de Oviedo Javier González Santos presentó hoy su estudio histórico artístico sobre la obra propiedad del Colegio de Abogados, datada en 1776

El Colegio de Abogados de Oviedo acogió el acto de presentación del libro “Nuestra Señora de Covadonga, del pintor Francisco Reiter” del que es autor el profesor de Historia del Arte de la Universidad de Oviedo Javier González Santos. Junto al autor de este estudio histórico artístico sobre la obra de Reiter, asistieron al acto Emilio Marcos Vallaure, exdirector del Museo de Bellas Artes y exconsejero de Cultura, quien presentó al autor del libro; Ignacio Cuesta, decano del Colegio de Abogados de Oviedo; Pelayo Fernández-Mijares, secretario de la corporación y Julio Noriega, bibliotecario del ICAO.

La obra de Reiter, el artista más afamado del Principado de la segunda mitad del siglo XVIII, es un encargo realizado por la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados, según consta en el acta de la reunión que celebró el 8 de mayo de 1776 y en la que se acordó “que se haga un quadro de Nuestra Señora de Covadonga de bara y quarta de alto y bara de ancho, con bien (sic) marco, para poner en el Altar el día de la fiesta” colegial.

En el cuadro, el autor reproduce una estampa de devoción de la época que fue grabada en 1759 sobre una composición original del pintor asturiano Antonio Miranda. Reiter verticaliza la composición original y ofrece una exacta reproducción de la disposición de la iglesia rupestre que se encontraban en el primitivo santuario de Covadonga –antes del incendió de 1777- magnificando la imagen de la Virgen de Covadonga.

Javier Santos afirmó que Reiter “no fue un gran artista; es un pintor ingenuo y autodidacta, contemporáneo de Goya, que aprendió a la vista de estampas, grabados y cuadros de otros artistas, y que tiene un estilo colorista y detallista”. Sin embargo, en su opinión el cuadro que realizó para el ICA Oviedo “tiene un gran valor histórico y documental porque muestra el santuario primitivo tal y como era antes de incendiarse y porque siempre ha estado vinculado al Colegio de Abogados pese a los avatares de su historia y a que hasta 2005 que adquirió su propia sede, siempre vivió en sedes prestadas”.

El decano del ICA Oviedo destacó la constante labor de preservación y divulgación de su patrimonio que realiza el Colegio, porque muchos de sus documentos y de obras tan poco conocidas como la de Reiter forman parte de la historia de Oviedo y del Principado, y su puesta en conocimiento de la sociedad es un deber de la corporación más allá de su labor como representante del colectivo profesional de la Abogacía.