21 septiembre 2015
El patrono de la Fundación Jesús López-Medel visita a la juez Yassmín Barrios en Guatemala
Aprovechando su viaje a Guatemala como observador internacional en las elecciones generales celebradas el pasado 6 de septiembre, el patrono de la Fundación Abogacía Española Jesús López-Medel se reunió con la juez Yassmín Barrios, galardonada con el Premio Derechos Humanos de la Abogacía en 2013.
López-Medel quiso con su visita transmitir a la juez un mensaje de afecto, reconocimiento y solidaridad de la Abogacía Española, “pues cuando el Consejo General de la Abogacía otorga un premio, no acaba ahí la relación, sino que procura mantener vivo el apoyo a los premiados, especialmente si están en situaciones difíciles como es el caso de la juez Barrios”.
“Yassmin Barrios, juez ejemplo y compromiso con la justicia y contra impunidad. Reconocida por muchos países. Guatemala no debe retroceder en DDHH”, escribió Jesús López-Medel en su perfil de Twitter.
Barrios fue galardona especialmente por su defensa a las víctimas y por su lucha en pro de la justicia en Guatemala. Condenó a personas a quienes nadie se había atrevido a sentar en el banquillo, como los responsables del asesinato de monseñor Gerardi en 1998 o los miembros de la unidad de élite del ejército guatemalteco, conocidos como “kaibiles”, culpables de la muerte de 200 civiles.
UN JUICIO HISTÓRICO
Presidió el tribunal que condenó por genocidio al expresidente Ríos Mont, uno de los juicios más difíciles de la historia de Guatemala, pero también histórico no solo para el pueblo guatemalteco sino para la justicia internacional, ya que fue la primera vez que se juzgó dentro de un marco nacional un caso por genocidio. El 11 de mayo de 2013, el tribunal presidido por Yassmin Barrios condenó a 80 años de prisión a Efraín Rios Montt por genocidio y crímenes de lesa humanidad (cometidos entre 1981 y 1982) contra mil setecientos indígenas ixiles. Diez días después, la Corte Constitucional de Guatemala anuló la sentencia por supuestos defectos de forma y ordenó un nuevo proceso para 2015.
Sin embargo, en agosto de este año el Tribunal B de Mayor Riesgo, que preside la jueza María Eugenia Castellanos, resolvió que debido a la “incapacidad comprobada” del acusado para comparecer en un juicio oral público, sólo se realizará uno para “la aplicación exclusiva de medidas de seguridad y corrección”. Además, decidió que el proceso se realice con presencia de las víctimas, “sin intervención” de los medios de comunicación. En la resolución, se acordó también que sean dos abogados los que representen al acusado en el nuevo juicio.
Ríos Montt puede ser encontrado inocente o culpable, pero no se le aplicará pena alguna debido a su condición. Sin embargo, como dijo Yassmín Barrios en una entrevista publicada en la revista Abogados, aunque se anulara la primera sentencia la sentencia, “Guatemala sabe que el genocidio existió, y el resto del mundo también”.
EJEMPLO DE INDEPENDENCIA JUDICIAL
Reproducimos por su interés, las palabras pronunciadas por la juez Barrios al recoger el Premio Derechos Humanos de la Abogacía Española:
“Quiero compartirles que un juez o una jueza tiene que ser un líder en su comunidad, capaz de devolver la credibilidad a los ciudadanos en su sistema de justicia, capaz de contribuir con su trabajo diario, no solo a resolver conflictos sino también a fortalecer la armonía y la paz dentro de la comunidad en la cual se desenvuelve.
A lo largo de mi carrera judicial me he dado cuenta de la importancia que tiene para las personas el contar con jueces íntegros, responsables que puedan resolver sus conflictos sin ningún tipo de favoritismos, con legalidad, con obediencia, únicamente a la constitución y a las leyes, que no hagan caso de ningún interés político, ni económico, que puedan dar a cada quien lo que les corresponde, en el cual los ciudadanos puedan confiar que sus conflictos se van a resolver sin prejuicios y sin ningún tipo de discriminación, que no se va a hacer ninguna exclusión por pertenecer a un grupo étnico diferente o por tener un color de la piel diferente a los demás. En esa libertad de juzgar creo que es importante que se respete la dignidad de las personas y devolver esa credibilidad que todas las personas como ciudadanos necesitamos y merecemos.
El país es un país pobre. Sin embargo, hemos demostrado que somos capaces de juzgar con independencia judicial aún cuando tengamos pocos recursos humanos y materiales pero tenemos la capacidad de hacerlo. Creo que los jueces que hemos llevado a los tribunales de alto riesgo pueden servir como precedente a otros países que se encuentran en las mismas circunstancias que el nuestro, lo que se necesita es voluntad de hacer cumplir la ley. En mi país existen altos índices de violencia, los cuales inclusive abarcan a los jueces que nos corresponde juzgar. No obstante, hoy más que nunca aún dentro del difícil contexto económico político y social en el cual nos desenvolvemos es importante mantener y fortalecer la independencia judicial. Solo a través de jueces independientes podemos dar respuesta a ese pueblo que pide a gritos justicia”.