El premio del Concurso de Microrrelatos de agosto se va a Elche

Salvador Soler Campos, natural de Elche (Alicante), de 51 años, abogado en ejercicio desde hace 25 años, ha sido el ganador del premio de 500 euros del VI Concurso de Microrrelatos sobre Abogados –convocado por el Consejo General de la Abogacía Española y la Mutualidad de la Abogacía- correspondiente al mes de agosto de 2014.

Salvador, licenciado en Derecho, compagina el ejercicio de la abogacía con su afición a las letras. Se encontraba celebrando el Día de la Comunidad Valenciana en el momento de recibir la noticia y explicó emocionado que “es la primera vez que gano un premio en un certamen de relatos cortos, aunque sí había escrito textos para novela corta, cuentos y piezas teatrales en concursos locales e incluso gané un premio en 2004”. Supo de la existencia del concurso a través de un amigo, que no es abogado pero que participa mes a mes a través de la página web.

Curiosamente, el año pasado recibió la distinción por los 25 años en el ejercicio de la Abogacía en un acto en la sede del Colegio de Abogados de Elche, en la que también tuvo lugar la entrega del diploma y cheque a la ganadora del concurso de febrero de 2013, Maria Luisa Serna, por su relato “Consejos de un maestro”. Un año y medio después ha vuelto a recaer el premio en esta ciudad alicantina.

Con su relato `Los jueces dormimos mejor´ ha conseguido convencer al jurado con una simpática anécdota vivida por una juez en su difícil convivencia con su marido abogado: “El relato tiene algo de autobiográfico, pero no del todo. Viví un pleito especialmente delicado y en la noche proferí algún grito de enfado y mi mujer, que no es juez, sino profesora, fue incapaz de conciliar el sueño”, confiesa sonriendo recordando lo ocurrido. Escribir la historia ganadora le llevó tan solo una tarde, mientras estaba disfrutando de sus vacaciones en Santa Pola.

El concurso ha atraído en el mes de agosto a autores de toda la geografía nacional y a más de una veintena de países europeos, asiáticos y americanos. En el caso de España, se ha impuesto la participación de los madrileños, seguida muy de cerca por Andalucía y Barcelona. De los más de 600 relatos recibidos, el 65 % lo han escrito hombres frente al 35 % de mujeres.

Este relato se sumará a los demás ganadores mensuales para disputarse el premio de 3.000 euros que otorga la Abogacía Española al finalista anual. Todos ellos, junto con los seleccionados por el jurado de entre todos los recibidos en el mes de agosto pueden leerse en www.abogacia.es y www.mutualidadabogacia.com, dentro del microsite dedicado a este concurso que albergan ambas páginas web.

Relato ganador:

Los jueces dormimos mejor

¡Jamás me casaré con un abogado! Es suplicio reservado a sufridores. Y no es que no quiera a mi novio, es que no me deja dormir. Inútil toda concentración, no concilio el sueño y castigo mis pupilas hasta el amanecer. Él no sospecha nada porque duerme como un niño; pero cada noche, a la una, regurgita un “¡con la venia!” que me sobresalta de espanto; y a las tres, resuella un estentóreo “¡¡protesto!!” que me ha ocasionado un disgusto con el presidente de la comunidad. Rendida, a las cuatro, trato de habilitar el sofá-cama del salón, desde donde oigo su escalofriante “¡¡¡no hay más preguntas!!!”. Pero lo intolerable, lo que no puedo soportar, es que al alba, él ya en pie, ofreciéndome café, me susurre con ternura “te quiero señoría”. Y lo soy, pero no puedo más y prefiero casarme con un juez. ¡Dormimos mejor!