14 diciembre 2015
II Congreso DDHH Abogacía: expertos reclaman una ley integral contra la trata de seres humanos
La Fundación Abogacía Española organizó, los días 9 y 10 de diciembre, el II Congreso de Derechos Humanos de la Abogacía, que este año se ha centrado en la detección y defensa de las víctimas de trata con fines de explotación sexual. Una lacra que fue definida a lo largo del congreso como la “esclavitud del siglo XXI”.
Además de reclamar una Ley Integral contra la Trata, los participantes coincidieron en exigir que la lucha contra la explotación de seres humanos se aborde con un enfoque de derechos humanos, que se creen turnos de oficio específicos de trata y que exista mayor coordinación institucional y formación especializada para quienes trabajan en este ámbito.
INAUGURACIÓN
En la inauguración, el presidente de la Abogacía Española, Carlos Carnicer, resaltó los esfuerzos de la Abogacía por sensibilizar y formar a los letrados en la detección de víctimas de trata. Carnicer puso como ejemplo el Aula Derechos Humanos, un proyecto de la Fundación Abogacía para dar herramientas a los letrados que les permitan identificar a las víctimas, especialmente en los turnos de Oficio de extranjería o violencia de género.
Por su parte, el vocal del CGPJ Fernando Grande-Marlaska, quien también participó en la inauguración, subrayó que la trata es una forma más de violencia de género, como estableció el Convenio de Estambul, puesto que el 95% de las víctimas lo son para explotación sexual y la mayoría son mujeres. El juez insistió en que una víctima debe ser protegida desde el momento de su identificación, con independencia del procedimiento judicial.
Finalmente, la defensora del Pueblo, Soledad Becerril, alertó del incremento de las víctimas de trata entre los millones de refugiados que huyen de la guerra, la persecución o el hambre, y la proliferación de redes ”enormemente sofisticadas”. “Europa no puede cerrar sus puertas a las personas que huyen, porque eso es lo que quiere el Estado Islámico”, aseguró, y pidió más generosidad a España a la hora de conceder asilo a víctimas de trata. Becerril criticó que, mientras la persecución de los delitos relacionados con la trata de personas está suficientemente reglada, no es así en la atención y protección a las víctimas.
PANEL 1: TRATA DE PERSONAS CON FINES DE EXPLOTACIÓN SEXUAL. CONCEPTO Y CONTEXTO
En el primer panel, moderado por el periodista de la Cadena SER Nicolás Castellano, se analizó el concepto de trata de personas con fines de explotación sexual y el contexto en el que se produce. Cuatro millones de personas, también españolas, son víctimas de trata cada año, denunció Castellano. La trata, que “no es solo un delito, es la vulneración de los derechos humanos” –en palabras de Marta González, coordinadora del proyecto Esperanza de las Adoratrices- debe ser abordada con un enfoque de derechos humanos, como coincidieron en reclamar las participantes del panel. Las ponentes denunciaron que no existe una protección real de las víctimas, algo que según Helena Maleno –investigadora experta en migraciones y trata de seres humanos- y Viviana Waisman – presidenta de Women’s Link Worldwide- es responsabilidad del Estado. Y subrayaron la importancia de la formación de todas las personas que intervienen en casos de trata.
En cuanto al concepto de víctima de trata, Marta González explicó que se debe manejar el del Convenio del Consejo de Europa de 2005, que no condiciona el reconocimiento de la condición de víctima a la interposición de denuncia. Además, reclamó que “los profesionales que están en primera a línea, como los abogados, aprendan a detectar los casos, a tener claves para intervenir sin añadir sufrimiento a las víctimas”, que en un 70-80% son mujeres de perfiles muy diversos y no son víctimas de trata exclusivamente con fines de explotación sexual.
Helena Maleno explicó que “hay que entender la trata en un contexto de oferta y demanda” que se produce en una sociedad de “capitalismo brutal” en la que los seres humanos se convierten en mercancía. Y denunció los fallos del sistema, que no es capaz de proteger a las víctimas y ejerce la violencia incluso quitándoles a sus hijos. Por su parte, Viviana Waisman consideró fundamental ser conscientes de los estereotipos que hay en torno a la trata y eliminarlos para hacer un trabajo efectivo de protección de derechos.
La mesa concluyó con la petición de que los hijos de las víctimas también tengan reconocimiento y protección.
PANEL 2: EL PAPEL DEL ABOGADO/A ANTE PERSONAS VÍCTIMAS DE TRATA. PRESENTACIÓN DE LA GUÍA PRÁCTICA PARA LA ABOGACÍA
En el marco del Congreso, se presentó una Guía Práctica para la Abogacía, coordinada por el abogado Santiago Yerga, que pretende ser una herramienta eficaz para los letrados en la detección y defensa de las víctimas de trata.
El decano de Pamplona, Alfredo Irujo, moderó esta mesa, en la que participaron Javier Lara, decano de Málaga y presidente de la Comisión de Asistencia Jurídica Gratuita de la Abogacía Española; Elena Arce, abogada, jefa del área de migraciones del Defensor del Pueblo, y Amparo Díaz, coordinadora del Turno de Oficio de Trata del Colegio de Abogados de Sevilla.
Lara afirmó que es prioritario que los Colegios de Abogados pongan en marcha turnos de oficio especializados en trata como los que ya existen en Sevilla y Madrid, o en Málaga, donde hay un turno para mujeres que ejercen la prostitución, la mayoría en situación de trata. Lara aseguró que los abogados de oficio son “absolutamente cruciales” para la detección de las víctimas, “especialmente en el periodo de reflexión” e insistió en que deben trabajar de la mano con organizaciones especializadas.
Elena Arce, que ejerció como abogada de oficio más de 15 años, se mostró convencida de que el abogado puede hacer mucho más por las víctimas y criticó que menores mal identificadas acaban en CIEs por una mala asistencia letrada, cuando deberían estar en centros de protección. “En España solo se identifica una de cada 20 víctimas. La policía las ve como víctimas de un delito, pero un abogado tiene que ver una vulneración de DDHH”, aseguró.
Amparo Díaz, señaló que los abogados deben llevar “la voz completa de las víctimas a los tribunales, con aportaciones de ONG, policía, sanitarios, etc”. Acabar con esta esclavitud, según Díaz, exige un cambio: no basarla en redadas para la protección de fronteras, sino darle un enfoque de DDHH; dar una protección adecuada a las víctimas, que no son solo explotadas sexualmente, sino también laboralmente, o en matrimonios forzados.
Es fundamental, según Díaz, saber leer indicadores de todas las formas de violencia que sufren las mujeres a lo largo del proceso de deshumanización que es la trata. Además de las fases de captación, traslado y explotación, “las víctimas son adiestradas para comportarse con los clientes, para saber qué decir a las ONG, a la policía, etc.”, aseguró.
“El abogado no solo debe promover medidas de protección, sino garantizar que se cumplan y preparar a las víctimas para el impacto del juicio”, concluyó.
Finalmente, Santiago Yerga, autor de la Guía, la definió como un “pequeño sherpa jurídico para despertar los sentidos del abogado cuando esté ante posibles situaciones de trata”. Yerga insistió en que la víctima de trata no es una víctima de un delito más, sino que necesita protección “a lo largo del tiempo y el espacio, ya que hay infracciones de carácter transnacional”. El autor de la Guía exigió que el abogado esté presente en la entrevista policial y consideró imprescindible una Ley integral. Yerga resumió su intervención en una frase “Sin identificación y sin detección, no hay protección”
PANEL 3: ACTORES INTERVINIENTES. COORDINACIÓN INSTITUCIONAL
Moderado por Rocío Mora, coordinadora de APRAMP, el último panel de la mañana del primer día abordó la coordinación institucional, algo fundamental para todos los intervinientes en la mesa, que también apostaron por coordinar esfuerzos con todos los implicados en la lucha contra la trata y por ofrecer una atención integral a las víctimas. Rocío Mora también solicitó dar alternativas reales a las víctimas y ser proactivos en su búsqueda.
Para José Ángel González, comisario jefe de la Brigada Central de Trata de Seres Humanos de la Policía Nacional, “la colaboración con la fiscalía y la abogacía es esencial” para detectar a las víctimas de trata, mientras que la concienciación es fundamental para combatir esta “lacra”, una de las prioridades de la Policía Nacional. El fiscal de Sala Coordinador de Extranjería, Joaquín Sánchez-Covisa, destacó la “magnífica coordinación” entre Fiscalía, cuerpos y fuerzas de seguridad, ONGs y colegios de abogados y lamentó que la persecución penal dependa del consentimiento de la víctima. Además, señaló que la prostitución es la causa de que haya víctimas de trata y abogó por la prohibición del proxenetismo, mientras que Rocío Mora indicó que “mientras exista demanda siempre habrá oferta”.
Mariano Calleja, coordinador del Turno de Oficio de Trata del Colegio de Madrid, explicó que en este turno –que responde a la demanda de los protocolos internacionales- los abogados trabajan en coordinación con el resto de personas y organizaciones implicadas, aunque lamentó la falta de coordinación institucional que hasta el momento han vivido. “Es fundamental que las víctimas cuenten con la asistencia de un abogado de oficio desde el primer momento, desde la entrevista policial”, subrayó.
PANEL 4: CLAVES PARA REACCIONAR ANTE UN PROBLEMA. TRATA Y PROSTITUCIÓN
La relación entre trata y prostitución se abordó en un panel moderado por el periodista jefe de investigación de La Sexta, Manuel Marlasca, en el que participaron Miguel Lázaro, experto en género; Beatriz Ranea, socióloga e investigadora y Ana Magarzo, abogada especialista en trata. Según Lázaro, el acceso al sexo es ahora más fácil que nunca y sin embargo el consumo de prostitución no ha disminuido, incluso es muy elevado en hombres menores de 30 años. Esto es así porque los consumidores “compran plusvalía de género, ilusión de dominio”, aseguró.
“La tensión que viven los hombres entre la masculinidad que han aprendido y la exigencia de igualdad de las mujeres se expresa en muchos casos en la violencia de género o en el consumo de prostitución”, concluyó Lázaro para quien solo la igualdad real entre hombres y mujeres acabará con la prostitución.
Beatriz Ranea, quien ha hecho varios estudios con consumidores de prostitución, aseguró que la trata existe porque se necesita proporcionar mujeres a un mercado que cada vez las necesita más jóvenes y más baratas. “La prostitución es una institución social y como tal se puede cambiar, si hay voluntad de hacerlo”, aseguró. Aunque no hay un perfil socioeconómico claro entre los consumidores, el 99,7% son hombres, “educados en una sociedad machista, sexista y patriarcal que ocultan a su entorno que son consumidores”. Para los jóvenes es más fácil y barato recurrir a esta práctica, aseguró Ranea, que una relación sexual pactada “que requiere cierto esfuerzo”. La socióloga insistió en que es importante dar voz a las víctimas de trata, pero también a los proxenetas y a los demandantes de prostitución.
La abogada Ana Magarzo denunció la tolerancia con el proxenetismo y la poca concreción en el Código Penal de este delito, “lo que pone muy difícil a los abogados perseguirlos”, aseguró. “Si no se desmantela el comercio sexual montado por personas ajenas a las víctimas, será difícil que se acabe la trata”, denunció la abogada quien recordó que hay 1.500 clubes de alterne registrados. A la pregunta planteada por Manuel Marlasca sobre si se debe trasladar la presión policial y social al cliente, Magarzo contestó que sí, “pero sin dejar de mirar a las víctimas, porque eso puede llevar a trasladarlas de lugar, hacerlas aún más invisibles”.
Magarzo señaló que el acortamiento de los plazos para la instrucción establecidos en la reforma de la LECrim va a afectar negativamente en los casos de trata. Marlasca recordó que la investigación que acabó con el desmantelamiento de la red de “Cabeza de cerdo”, la mayor red de trata de Europa, tardó diez años.
En cuanto a la cuestión de regularizar o legalizar la prostitución, que no puede separase de la trata, los participantes en el panel se mostraron contrarios. Beatriz Ranea apostó por el modelo sueco, abolicionista, “porque en otros países que la han regularizado, como Holanda o Alemania, solo se ha favorecido a la industria del sexo y a los proxenetas y se ha perjudicado aún más a las mujeres”.
CHICAS NUEVAS 24 HORAS
La sesión del primer día concluyó con la proyección de ‘Chicas nuevas 24 horas’, de Mabel Lozano, en la que denuncia el negocio de la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Tras la proyección, la directora y Sonia Gumpert, patrona de la Fundación Abogacía y decana del Colegio de Abogados de Madrid, mantuvieron un coloquio sobre el documental, que para Gumpert muestra una “realidad descarnada”. Mabel Lozano explicó que las víctimas son cada vez más jóvenes y “aunque hablamos de desnudez de cuerpos, sufren desnudez de derechos y son también “víctimas de la exclusión social, del miedo, del silencio y de la invisibilidad”.
PANEL 5: MENORES VÍCTIMAS DE TRATA CON FINES DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
El primer panel de la segunda jornada abordó la situación de de las niñas y niños víctimas, y también los hijos de víctimas, que, según Unicef, deben ser considerados como tales. Según esta organización, 1,2 millones de niños son víctimas de trata al año.
Milagros Nuñez, de Cruz Roja, Margarita de la Rasilla, de ACNUR, y la abogada Patricia Fernández Vicens, junto con el moderador de la mesa, Carmelo Cascón, decano del Colegio de Abogados de Cáceres y patrono de la Fundación Abogacía, pusieron de manifiesto la extrema vulnerabilidad de estos menores, muchos de los cuales nacen en tránsito migratorio, en el contexto de la propia red de trata, y no se registran.
Nuñez denunció cómo en esos tránsitos se separa a los niños de las madres y cómo las redes utilizan a los menores para coaccionar a las madres o lograr que las mujeres que quieren se queden en el territorio.
Margarita de la Rasilla trató de los menores víctimas, que además pueden ser refugiados. Hay que evitar que sean devueltos si en su país tienen riesgo de volver a ser captados, o sufran represalias por parte de la mafia que los captó o si el hecho de haber sido víctima los puede estigmatizar en su país. El problema fundamental, según De la Rasilla, es que viajan con documentación falsa que acredita que son mayores de edad. “Los elementos de determinación de la edad llevan a resultados erróneos que impiden que se adopten medidas especiales de protección. Los menores de 16 o 17 años son tratados como mayores, devueltos y entregados de nuevo a las mafias”, aseguró.
Patricia Fernández Vicens, que calificó la trata de niñas y niños como “la máxima expresión de la barbarie” aseguró que el actual sistema de determinación de la edad está siendo utilizado por las redes para perpetuar la trata de seres humanos. La abogada señaló un grupo de niños que cuesta mucho ver como victimas: los menores rumanos de etnia romaní explotados para la mendicidad, que vemos como victimarios y no como víctimas y que es frecuente encontrar en el turno de oficio tras ser detenidos por pequeños hurtos o estafas. Alertó también sobre el elevado número de menores en los CIE calificados por el fiscal como mayores de edad y, por tanto, sin la especial protección que deberían tener.
PANEL 6: LA TRATA DESDE SU ORIGEN
El último panel del Congreso abordó la trata de seres humanos desde su origen, en una mesa moderada por Luis Delgado de Molina, patrono de la Fundación, y en la que participaron Nicoleta Ionescu, trabajadora social; Carmen Miguel, directora legal regional de la oficina de Madrid de Women’s Link, y Ana María Estévez, coordinadora de la unidad de rescate de APRAMP. Una mesa en la que las participantes coincidieron en reclamar la implicación y colaboración de los países de destino en la erradicación de la trata.
El testimonio de Nicoleta Ionescu, que tuvo que dejar su trabajo con víctimas de trata “porque no podía soportarlo, nadie te enseña cómo se gestiona esto”, emocionó al auditorio. Ionescu relató cómo las víctimas de trata son reclutadas en su país natal, Rumanía, “el mayor exportador de carne viva”, un lugar en que las víctimas pueden provenir de familias desestructuradas, pero también de familias que prostituyen o venden a sus hijas. Son mujeres que, en general, tienen muy bajo nivel educativo, poca experiencia de vida, bajísima autoestima y para las que entrar en una red de trata “es lo menos malo que les ha pasado en la vida”. Son seducidas por los “lover boys”, que las hacen sentir especiales y consiguen que acepten prostituirse por amor. Son coaccionadas con violencia física y amenazas a sus familias. Mujeres que no son vistas como personas, sino como máquinas de hacer dinero. Ionescu reclamó la implicación de ciudadanos e instituciones de los países de destino para ayudar a frenar la trata. Es difícil, pero “lo que estas mujeres viven no es normal y hay salida”, concluyó.
“España no puede devolver a las víctimas de trata sin valorar los riesgos de esta devolución”, subrayó Carmen de Miguel, que explicó la importancia de conocer el contexto de procedencia de las víctimas, algo en lo que trabajan en Women’s Link con las investigaciones que realizan. Por su parte Ana María Estévez consideró imprescindible la existencia de un turno de oficio específico y la creación de una Ley Integral. Y habló de la prostitución, que genera en España cinco millones de euros al día y tiene unas redes muy bien organizadas que van por delante de la policía y la ley. Unas redes en las que las víctimas son cada vez menores –de 14, 15 ó 16 años-, pagan por el lugar que ocupan en las calles y están constantemente vigiladas.
Las intervenciones del público tras este panel fueron especialmente críticas con el papel de los estados en la trata, a los que se consideró responsables por fomentar la desigualdad y no dar protección a las víctimas.
El Congreso concluyó con la lectura de las conclusiones por parte de Carles McCragh, vicepresidente de la Fundación de la Abogacía Española, y la lectura del Manifiesto de Compromisos por parte de la secretaria general del Consejo General de la Abogacía, Victoria Ortega.