01 febrero 2013
La familia de la víctima del ‘kamikaze’ recurrirá el indulto ante el Ministerio de Justicia
La familia del joven que perdió la vida en un accidente en 2003 en la AP-7, en el tramo entre Silla-San Juan, provocado por un ‘kamikaze’ condenado a 13 años de prisión que acaba de ser indultado por el Gobierno, recurrirá ante el Ministerio de Justicia la medida de gracia adoptada.
Así lo ha avanzado en un comunicado la presidenta de Stop Accidentes y delegada en la Comunidad, Ana Novella, quien ha concretado que el recurso se presentará este lunes, a las 12.00 horas, en la Dirección Territorial del Ministerio de Justicia en Valencia. A la presentación del escrito asistirá la hermana del fallecido, Lotero Dolz; el letrado de la familia, Agustín Ferrer; y la representante de Stop Accidentes.
El abogado ha explicado, en declaraciones a Europa Press, que se trata de un recurso de reposición, que es paralelo al que presentaron el 25 de enero ante el Tribunal Supremo (TS). Así, mientras este último va por vía judicial, el primero lo tiene que resolver el propio Consejo de Ministros.
Ferrer ha indicado que el recurso del lunes se dirige directamente a las personas que dictaron el indulto para el ‘kamikaze’ –defendido por el despacho de abogados en el que trabaja el hijo del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón–, y “supone una oportunidad para que el Ministerio de Justicia recule y declare la nulidad del indulto”, ha comentado. El Ejecutivo tiene un plazo de un mes para dar una respuesta y, de no hacerlo, se entenderá que deniega la petición por silencio negativo.
En el caso en el que el Gobierno decida estimar el recurso, podría anular el indulto, lo que provocaría que la familia retirase el anuncio de recurso interpuesto ante el Tribunal Supremo por este mismo asunto, ha explicado el abogado.
El objetivo de este escrito ante el ministerio es “agotar” las vías para intentar revocar una decisión del Gobierno “que ha hecho mucho daño a la familia” de la víctima, ha asegurado el letrado. “Queremos forzar a que contesten, a que se pronuncien sobre la decisión”, ha agregado.
Alberto Ruíz-Gallardón detalló hace unos días que las razones que llevaron a Justicia a conceder el indulto fueron que el conductor no tenía antecedentes y que se constató que no conducía bajo efectos de alcohol, a parte de que fue diagnosticado de epilepsia por el servicio público de salud de Castilla-La Mancha.
Asimismo, argumentó que el centro penitenciario informó favorablemente, constatando que los nueve años transcurridos desde los hechos de su ingreso en prisión no había cometido delito, se arrepintió, se reintegró socio-laboralmente y no había pronóstico de reincidencia.
RELATO DE LOS HECHOS
El incidente tuvo lugar el 1 de diciembre de 2003. En la tarde de ese día, el hombre golpeó su vehículo contra otro cuando circulaba por la A-7, a la altura de Torrente-Calicanto. Éste tuvo que apartarse, se detuvo en el arcén y avisó de lo ocurrido a los servicios de emergencia.
Seguidamente, el conductor accedió a la AP-7 por el peaje de Silla, y cuando llegó a la altura del punto kilométrico 551-552, efectuó un cambio de sentido y comenzó a circular en sentido contrario entre los dos carriles, a gran velocidad.
Los coches con los que se cruzaba tenían que apartarse hacia el arcén o a la mediana para evitar una colisión. El hombre circulaba sin emplear ningún otro dispositivo para avisar al resto de usuarios de la vía de su conducción contra sentido, y sin efectuar maniobra alguna de evasión para eludir los vehículos que circulaban en sentido correcto.
Cuando se hallaba en el tramo Silla-San Juan, en el término municipal Polinyà del Xúquer y Partido Judicial de Sueca, en tramo recto, a nivel y de buena visibilidad, colisionó frontalmente contra un turismo en que viajaba una pareja. Como consecuencia del impacto, el hombre falleció de un traumatismo craneoencefálico y su entonces pareja sufrió diferentes lesiones.
El Ejecutivo aprobó el 7 de diciembre de 2012 indultar al hombre, condenado como autor de un delito de conducción con grave desprecio para la vida de los demás, en concurso ideal con un delito de homicidio, un delito de lesiones, una falta de lesiones y una falta de daños.