20 enero 2016
La presidencia de la UE pide una “reducción drástica” de la llegada de refugiados
El primer ministro de Países Bajos y presidente de turno de la Unión Europea desde este enero, Mark Rutte, ha asegurado este miércoles que es urgente “reducir drásticamente” la llegada de refugiados a suelo comunitario en un plazo de dos meses, porque las cifras actuales “no son viables”, informa Europa Press.
En un debate ante el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo (Francia), Rutte ha repasado las que serán las prioridades de trabajo para la presidencia europea que ejercerá este semestre, entre las que ha destacado la crisis migratoria, la recuperación económica y el desarrollo del mercado interior.
“Las cifras actuales no son viables, el tiempo apremia y necesitamos una reducción drástica delnúmero de llegadas de refugiados en las próximas seis/ocho semanas”, ha indicado.
“Estamos todos en el mismo barco”, ha recalcado, tras considerar “crucial” controlar las fronteras exteriores de la UE, ofrecer opciones “humanitarias” a los refugiados y contar con las instalaciones necesarias para asegurar el registro de todos los inmigrantes que llegan.
También el acuerdo alcanzado por la UE con Turquía, para que Ankara tome medidas para contener el paso de inmigrantes a cambio de una ayuda para los refugiados de 3.000 millones de euros debe “cumplirse rápidamente”. El fondo de ayuda está aún bloqueado en el Consejo por la falta de acuerdo a 28 sobre el reparto de la carga del mismo.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que también ha participado en el debate, ha reiterado el mensaje que ha enfatizado en sus últimas comparecencias: “El coste de la ausencia de Schengen será muy elevado”.
Juncker ha criticado así a los Estados miembros que se comportan “a la ligera” y reintroducen “uno tras otro” los controles sistemáticos en sus fronteras interiores, al tiempo que ha instado a los 28 y a la Eurocámara a tramitar “con urgencia” su propuesta para crear un cuerpo europeo de guarda de fronteras.
“Si las fronteras se cierran, si el mercado interior empieza a sufrir las consecuencias incontrolables, llegará el día en que nos preguntaremos si realmente necesitamos una moneda única, si no tenemos ya ni mercado interior ni libre circulación”, ha resumido.