29 octubre 2018
La sede del Colegio de la Abogacía de Albacete acoge un encuentro de «Diálogos de la Abogacía»
Desde el Consejo General de la Abogacía se ha puesto en marcha el Proyecto “Diálogos de la Abogacía” con la finalidad de construir entre todos, Colegios y abogados, el Congreso Nacional de la Abogacía 2019, recabando en los diferentes colegios de todo el territorio nacional ideas sobre temas de máximo interés para los abogados para debatir en el Congreso de 2019, ponentes de interés, colaboradores o patrocinadores, etc. involucrando a los ICAS en el proyecto, de tal suerte, que sean ellos mismos el motor del cambio a nivel local e imagen de una abogacía moderna.
Así las cosas, el pasado día 28 de septiembre se organizó por parte del Ilustre Colegio de la Abogacía de Albacete, un encuentro con profesionales de diversos sectores, esenciales para la abogacía en el nuevo marco en el que se desenvuelve actualmente nuestra profesión, contando con la presencia de la Presidenta del Consejo General de la Abogacía, Victoria Ortega, así como de Albino Escribano Molina, Decano del Ilustre Colegio de la Abogacía de Albacete y Mª Victoria Tárraga Sánchez, Diputada Sexta del Ilustre Colegio de la Abogacía de Albacete.
Todos los asistentes al acto son profesionales representativos de sus respectivos colectivos, invitados precisamente por representar modelos de transformación tecnológica en sus respectivos sectores, así contamos con la participación de:
Lorenzo Santiago Luna Alonso. Letrado de la Administración de Justicia de la Primera Categoría, Secretario de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha desde el 22 de junio de 2011 hasta el 1 mayo de 2017. En este período se realizó la implantación de la Nueva Oficina Judicial (NOJ) en los partidos judiciales de Ciudad Real (2010-11) y Cuenca (2011), y del Sistema Integral de Justicia (SIJ) en Cuenca (2015-2016). Integrante del Grupo de Trabajo Procuradores-Letrados de la Administración de Justicia en el marco del Comisión Técnica Estatal de la Administración Judicial Electrónica (CTEAJE).
Alfredo Delgado García. Registrador de la propiedad en Hellín (Albacete), Decano de los Registradores de la Propiedad de Castilla-La Mancha, quien ha vivido de primera mano la implantación de la firma electrónica, siendo el colectivo de Registradores pionero en la certificación digital; Conocedor de los sistemas y herramientas informáticas usados en los registros de la propiedad, siendo de los sistemas más completos en cuanto a almacenamiento y trazabilidad de datos.
Juan Carlos Cantó Martínez-Falero. Asesor a empresas: Estrategia Tecnológica y Negocio digital. Profesor asociado de Escuela de Negocios ESIC–ICEMD, Programa Explorer Banco Santander, ADECCO Training. Profesor y consultor en EOI. Mentor para emprendimiento en Youth Business Spain. Conferenciante sobre emprendimiento, los negocios y marketing digital, TIC y el mundo online. Director Centro de Apoyo Tecnológico a Emprendedores BILIB. (www.bilib.es).
Aurora Jiménez García. Consultora y Formadora de Marketing, Diseñadora de Estrategias Comerciales, formadora en la Confederación de Empresarios de Albacete/FEDA, Ilustre Colegio de la Abogacía de Albacete/ICALBA, Colegio Oficial de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de Albacete/COAATIE, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Cámara de Comercio de España, Asociación de Minusválidos de Albacete/AMIAB, Fundación ONCE o Escuela Superior de Marketing & Business School/ESUMA, entre otros. Mentoring con jóvenes emprendedores, en la fundación Youth Business Spain desde APROFEM.
Esther Ruiz. Licenciada en Derecho. Responsable de Marketing y Comunicación en Publipunto, empresa líder en publicidad y venta directa offline y online. En 2013, en sociedad con Atresmedia creadores de tienda.tv, puesta en marcha de un proyecto de comunicación y venta, cuya función principal es el diseño de la estrategia y creatividad publicitaria. En alianza con el Grupo Cope creación del elbaulmaraillo.es, encargada de toda la estrategia, logística, comunicación y creatividad comercial. Premio Antena de Plata, en la Categoría Especial a «La
innovación en la Comunicación Publicitaria», concedida por la Federación de Asociaciones de
Radio y Televisión (2015).
Enrique Torres Gómez. Licenciado en Derecho. Titulación complementaria: Curso de Consolidación de Empresas en Base Tecnológica y Curso de creación de empresas innovadoras, impartidos ambos por el Centro Europeo de Empresas e Innovación de Albacete. Actualmente abogado en ejercicio, encargado de CEO Plataforma Web abogadosalbacete.net (encargado del modelo de negocio, prestando servicios legales y colaborando con varios despachos de Abogados sitos en Albacete, especialistas en materia para prestar un servicio integral). Encargado de CEO Plataforma Web infoaccidentes.net (encargado de modelo de negocio, prestando servicios integrales para accidentados en accidentes de tráfico en toda España). Administrador solidario y Gerente de Assistance Digital Technologies S.L. dedicada a servicios de asistencia mediante tecnologías de la información, participante de la 3º Edición emprendedores Business Booster contribuyendo en proyectos digitales y apps. Además fue miembro de la ejecutiva de CEAJ siendo el responsable de la comisión de Nuevas Tecnologías y presidió la Agrupación de Jóvenes Abogados de Albacete.
Javier Sánchez. Ganador premio Sherpa 2016, por la creación de «Pasantes», un software de gestión de expedientes judiciales para profesionales del sector jurídico. El objetivo de este software es descargar al abogado o procurador de los aspectos técnicos de la Justicia Digital, permitiéndole ejercer su actividad de forma segura, sencilla y eficiente.
Durante el desarrollo de la reunión se trató desde los diferentes puntos de vista aportados por cada uno de los profesionales asistentes, el reto que suponen las nuevas tecnologías y la transformación digital en el ámbito de la abogacía y qué cuestiones resultan trascendentes para el Abogado del futuro, de cara a enfocar la convocatoria del próximo Congreso de la Abogacía.
Así, se analizaron las debilidades, fortalezas, amenazas y oportunidades que el abogado de hoy tiene con respecto al uso de la tecnología, concluyéndose a este respecto las siguientes conclusiones:
1. Que la mayor resistencia a la implantación de las nuevas tecnologías reside en el MIEDO:
– Miedo asentado en lo desconocido.
– Miedo que nace de la falibilidad de los sistemas.
– Miedo basado en la creencia de que los avances tecnológicos son una especie de intrusismo que acabará arrebatándonos el trabajo.
2. Que para combatir las posibles barreras que encontramos al acometer una transformación tecnológica, debemos apostar por:
– La formación: porque además de resultar básico para conocer los procesos las herramientas, sino para eliminar creencias derivadas de malas experiencias como usuarios.
– La formación ha de ser didáctica y practica: los profesionales de la abogacía no tenemos por qué conocer en profundidad las tecnologías, ni ser unos expertos informáticos, para implementarlas en nuestros despachos, igual que hemos aprendido a conducir un vehículo para desplazarnos, sin saber cómo funciona el motor de un coche, debemos usar las herramientas tecnológicas para desplazar a nuestra profesión hasta el futuro.
– Concienciación sobre el “no retorno”: El emblema usado para promocionar el congreso, es claro “fuimos presente, somos futuro”, ahí empieza todo, el futuro ya está aquí y la abogacía tiene que estar ahí, no se trata de si se quiere estar o no, es que no hay otro remedio, porque quedarse atrás supone la extinción de aquellos que no se adapten.
– Saber que la adaptación es la clave, pues la mayor fortaleza de nuestro gremio es la necesidad, los servicios jurídicos son necesarios y por consiguiente es un producto con demanda en el mercado, pero hay que readaptar el servicio a los nuevos procesos, a la inmediatez con la que se trabaja ahora, a la inmediatez que exige el cliente.
– Los ICAS y el Consejo, son un elemento esencial en la transformación digital, pues existe gran número de pequeños despachos, que no disponen de los recursos que las grandes empresas para implementar cuantas obligaciones adicionales suponen estos avances. Los ICAS y el consejo deben facilitar, formación, soporte técnico y asistencia en materia de seguridad para garantizar que toda la abogacía rema en un mismo sentido y evitar el intrusismo profesional, de empresas que prestan servicios jurídicos sin ser abogados y sin sometimiento a código deontológico alguno, pero que se desenvuelven fácilmente en los nuevos procesos tecnológicos.
3. Que para acometer la transformación tecnológica en la Abogacía debemos partir de las personas, que son la base de dicha transformación, por encima de los procesos y de la propia tecnología.
– En primer lugar, hay que ver a quién nos dirigimos.
– En segundo lugar, si nosotros mismos y el personal a nuestro servicio está preparado para implementar esos nuevos sistemas.
– En tercer lugar, cuales son los procesos de nuestra empresa.
– Por último qué tecnología o herramientas tecnológicas son precisos.
Y todo ello nos reconduce nuevamente a la formación y la necesidad de que los ICAS y el Consejo pongan sus infraestructuras al servicio de sus colegiados, para ayudar a implementar la tecnología en sus despachos.
4. Que la auto convicción es la mejor herramienta para la transformación tecnológica.
Que al igual que el 99% de la sociedad ha aceptado adquirir un smartphone y usar aplicaciones como whatsapp, sin que nadie le haya impuesto su uso, por el mero hecho de que han encontrado una ventaja en su uso y han accedido a ello sin que nadie se lo impusiera.
El Consejo de la Abogacía y los ICAS deben proyectar las ventajas de las herramientas o nuevos sistemas, a fin de que los propios colegiados valoren y accedan motu propio a la implantación de los mismos.
5. Que las tecnologías han de ser intuitivas, sencillas y ventajosas. Para conseguir el auto convencimiento del usuario, la herramienta ha de ser sencilla y útil, aquello que supone un sobreesfuerzo o una sobrecarga no resulta atractivo.
Nuevamente el Consejo y los ICAS tiene el papel de formar e informar sobre las ventajas para fomentar el avance tecnológico.
6. No se puede perder de vista el cliente: el abogado debe poner el foco en el cliente y los clientes son “omnicanal”, reciben la información por los más diversos canales y el abogado ha de ser visible por todos ellos, no podemos concentrar la proyección de la abogacía en un solo sentido. En la sociedad actual concurren clientes potenciales de 20 años de edad, con posibles clientes de 70 años, lo que implica que el abogado tenga que evolucionar y desarrollar una serie de herramientas para llegar tanto a los unos como a los otros.
La abogacía debe generar estrategias, lo tradicional en este sector ha sido que cada despacho “haga la guerra por su cuenta”, cada despacho realiza sus propias estrategias, pero en un mercado globalizado y con una competencia (venida desde fuera de la propia abogacía) los colegios y el consejo son fundamentales a fin de ayudar a crear estrategias comunes para fomentar no solo la supervivencia de esos despachos, sino su evolución y crecimiento para combatir el intrusismo profesional.
7. Que la transformación tecnológica no pasa por implantar una herramienta tecnológica, sino por adquirir una “caja de herramientas completa”.
Si cada despacho de abogados es distinto de los demás; si cada cliente es único y si debemos generar estrategias y propuestas de valor, no podemos pretender adquirir una herramienta que nos sirva para todo y para todos.
Hay que tratar de hacer un “traje a medida” para el potencial cliente, pues solo en tal caso, la abogacía podrá ofrecer un “valor añadido”.
En este camino es esencial el papel del Consejo y de los ICAS pues esa transformación digital a medida implica un esfuerzo a todos muchos niveles, que implica que no todos los despachos puedan llegar, sin un el respaldo institucional.
8. Falibilidad y riesgos derivados de las nuevas tecnologías.
La falta de formación, de medios, de concienciación incluso, implica que los abogados sean un blanco fácil en lo que a riesgos derivados del uso de nuevas tecnologías se refiere.
En este sentido los ICAS y el consejo deben hacer una labor de comunicación, concienciación y formación en aras a evitar miedos, resistencias y minimizar riesgos.
El abogado igual que instaló alarmas antirrobo o antiincendios en un despacho tradicional, debe establecer sistemas de seguridad para los nuevos riesgos, pero para ello debe tomar conciencia de los mismos y ello solo es posible con una buena labor de difusión.
9. A fin de fomentar la participación en el congreso se plantearon las siguientes propuestas.
– El congreso ha de ser atractivo para los abogados, debe mostrárseles que su asistencia revertirá en una ventaja para sus despachos.
– El mayor activo de que dispone un abogado es el tiempo, y siempre se rehúsa acudir a eventos de este tipo, por falta del mismo: por tanto hay que plantear que el tiempo que dediquen a la asistencia será “invertido” nunca perdido, pues con lo aprendido en lo sucesivo ahorrarán tiempo.
– Se debe fomentar la asistencia de personas ajenas al gremio, que puedan procurar un cambio de perspectivas en las sesiones.
– Que los temas y las sesiones sean eminentemente prácticos, que las ponencias sean a cargo de un profesional en la materia, no sean una clase magistral, sino que se fomente la participación y sea didáctico.
– Que lo aprendido en el congreso se pueda implementar en los despachos.
– Si el congreso va a girar en torno a las nuevas tecnologías, debe hacerse accesible y comprensible para todos los asistentes, desde el abogado joven de 25 años hasta el de 60 años.
– Que el asistente se lleve algo de congreso, por ejemplo mediante la inscripción en un taller donde se le enseñe a hacer algo concreto, sencillo que pueda usar en su despacho.
– Que se creen propuestas de valor, que se proyecten sesiones en las que los propios participantes sean los que creen el contenido.
– Que se fomente la comunicación, se debe concienciar que no es solo cuestión de ir hacia adelante, sino de no quedarse atrás.
– Abordar también cuestiones de marketing, pues atravesamos una re-evolución en la que debemos estar y ser visibles allí donde el cliente busca.