11 diciembre 2018
La UE intensifica la lucha contra la desinformación
La UE ha presentado un plan de acción que intensifica los esfuerzos para contrarrestar la desinformación tanto en Europa como más allá.
Para proteger sus sistemas democráticos y sus debates públicos, y de cara a las elecciones europeas de 2019, a las que hay que añadir una serie de elecciones nacionales y locales que se celebrarán en los Estados miembros en 2020,
Partiendo de los progresos realizados hasta ahora y en respuesta al llamamiento de los líderes europeos, en junio de 2018, a proteger los sistemas democráticos de la Unión, la Comisión Europea y la alta representante plantean medidas concretas para combatir la desinformación. Se trata, entre otras cosas, de crear un sistema de alerta rápida y de supervisar la aplicación del código de buenas prácticas suscrito por las plataformas online. Además, el plan de acción contempla aumentar los recursos dedicados a toda esta labor.
El plan de acción —elaborado en estrecha cooperación con la comisaria de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, Věra Jourová, el comisario de la Unión de la Seguridad, Julian King, y la comisaria de Economía y Sociedad Digitales, Mariya Gabriel— se centra en cuatro ámbitos clave a la hora de reforzar de hecho las capacidades de la UE y la cooperación entre los Estados miembros y la UE:
- Mejora de la detección: se dotará de un considerable número adicional de efectivos especializados y herramientas de análisis al Grupo Especial sobre Comunicación Estratégica y la Célula de Fusión contra las Amenazas Híbridas del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), así como a las delegaciones de la UE en los países vecinos. Se prevé que el presupuesto para comunicación estratégica del SEAE destinado a combatir la desinformación y sensibilizar sobre sus efectos nefastos duplique con creces el actual, pasando de 1,9 millones de euros en 2018 a 5 millones de euros en 2019. Los Estados miembros de la UE deberán complementar estas medidas reforzando sus propios medios de lucha contra la desinformación.
- Respuesta coordinada: se creará un sistema específico de alerta rápida entre las instituciones de la UE y los Estados miembros para facilitar el intercambio de datos y la evaluación de las campañas de desinformación y para emitir en tiempo real alertas de amenazas de desinformación. Además, las instituciones de la UE y los Estados miembros se centrarán en una comunicación proactiva y objetiva sobre los valores y políticas de la Unión.
- Plataformas e industria online: los firmantes del código de buenas prácticas deberán aplicar rápida y eficazmente los compromisos contraídos al firmarlo y centrarse en medidas urgentes de cara a las elecciones europeas de 2019. Esto incluye, en particular, garantizar la transparencia de la publicidad política, intensificar los esfuerzos por cerrar las cuentas falsas, identificar todas las interacciones no humanas (mensajes difundidos automáticamente por «bots») y cooperar con verificadores de datos e investigadores universitarios para detectar campañas de desinformación y hacer que los contenidos verificados sean más visibles y gocen de mayor difusión. Con la ayuda del Grupo Europeo de Reguladores Encargados de los Servicios de Comunicación Audiovisual, la Comisión garantizará un seguimiento estrecho y continuado de la ejecución de los compromisos.
- Sensibilización y empoderamiento: junto a campañas de información específicas, las instituciones de la UE y los Estados miembros fomentarán la alfabetización mediática a través de programas especializados. Se apoyarán equipos nacionales multidisciplinares compuestos por verificadores de datos e investigadores independientes que detecten y desenmascaren las campañas de desinformación en todas las redes sociales.
Por último, la Comisión también ha informado sobre los avances en la lucha contra la desinformación online desde que presentara su Comunicación de abril de 2018.
La Comisión Europea y la alta representante elaborarán y aplicarán las medidas contempladas en el plan de acción en estrecha colaboración con los Estados miembros y el Parlamento Europeo.
De cara a las elecciones europeas, el sistema de alerta rápida se introducirá a más tardar en marzo de 2019, medida que se completará reforzando los recursos correspondientes.
Como máximo a finales de 2018, los signatarios del código de buenas prácticas deberán presentar a la Comisión el primer informe sobre su aplicación, que la Comisión publicará en enero de 2019. Entre enero y mayo, las plataformas online deberán informar mensualmente a la Comisión. La Comisión también evaluará exhaustivamente los 12 primeros meses de aplicación del código. Si su aplicación y sus efectos resultaran insatisfactorios, la Comisión podrá proponer nuevas medidas, incluso de carácter reglamentario.
Fuente: http://europa.eu/rapid/press-release_IP-18-6647_es.htm