29 noviembre 2024
Las XXXII Jornadas de Extranjería reclaman que se antepongan los derechos humanos a la hora de legislar
Las XXXIII Jornadas de Extranjería, celebradas durante dos días en Cartagena, han concluido hoy viernes con una declaración exhortando a las autoridades a anteponer el respeto a los derechos humanos y los principios de solidaridad y de humanidad a la hora de legislar.
“Es fundamental que los gestores de las administraciones sepan que los migrantes no son cifras; son personas, son vidas que precisan del apoyo, la protección y la solidaridad de toda la sociedad. Cualquier norma y cualquier aplicación de una ley en estos ámbitos debe regirse por estos principios de forma que realmente sirvan para ayudar a estas personas vulnerables”, afirmó la Declaración Final.
“Para conseguir todo ello también estará siempre presente la Abogacia defendiendo todos y cada uno de sus derechos fundamentales”, añadió la Declaración.
Más de 400 abogados de extranjería llegados de toda España se han dado cita durante dos días en Cartagena para analizar las novedades legislativas en esta materia. En las diferentes ponencias se ha debatido sobre la reforma del Reglamento de Extranjería, la implementación del Pacto Migratorio europeo, el estatuto de los familiares de españoles, la situación de los menores migrantes en Canarias o de los nómadas digitales, entre otras cuestiones.
“La Abogacía Española reclama a todas las Administraciones Públicas que todas las políticas de cualquier índole, dirigidas al ámbito de extranjería y protección internacional, estén regidas por un escrupuloso respeto a los Derechos Humanos y por los principios de solidaridad y humanidad”, se señaló en la Declaración leída en la clausura por el presidente de la subcomisión de Extranjería y Protección Internacional del Consejo, Blas Jesús Imbroda.
En las jornadas se ha reclamado también la presencia de los profesionales de la abogacía en todos los trámites de extranjería como la única forma de garantizar plenamente el respeto a los derechos de los migrantes.
“Un año más reivindicamos que se incluya en la declaración universal de los derechos humanos el “derecho humano a la paz”, y que la paz y el respeto escrupuloso a los derechos humanos sea una realidad en todos los rincones del mundo”, concluye la Declaración.