29 junio 2017
Los certificados ACA de RedAbogacía, más cerca de Europa
La Autoridad de Certificación de la Abogacía (ACA) acaba de concluir uno de los últimos pasos para su adecuación al Reglamento Europeo de Identificación Electrónica 910/2014 (eIDAS) con la realización de la auditoría de cumplimiento y obtención del requerido “Informe de Evaluación de la Conformidad” emitido por los auditores de AENOR.
En concreto, se ha verificado que la Autoridad de Certificación de la Abogacía tiene correctamente implantadas una serie de medidas a nivel técnico, jurídico y procedimental que garantizan la seguridad de las operaciones asociadas al servicio de confianza de emisión de certificados. Una vez presentado el informe favorable de auditoría a la Secretaría de Estado para la Sociedad de la Información y la Agenda Digital del Ministerio de Energía y Turismo y Agenda Digital, sólo queda pendiente la aprobación final que es competencia de este Organismo Supervisor.
Con la entrada en vigor de este Reglamento se establece una legislación común a los estados miembros que ofrece una mayor seguridad jurídica y que equipara la validez de los certificados nacionales con la de otros emitidos por cualquier Autoridad de Certificación europea.
El requisito es que los prestadores de servicios de confianza se encuentren dados de alta en una Lista de confianza de prestadores de servicios electrónicos de confianza (TSL) para que todos los estados miembros los reconozcan y acepten. Consulta aquí cómo la Autoridad de Certificación de la Abogacía ya se encuentra en la TSL (página 160)
eIDAS establece un nuevo marco jurídico europeo aunando criterios tanto para las identidades como las firmas electrónicas. En el caso de las firmas electrónicas, se distingue entre firma electrónica simple, avanzada y cualificada, siendo esta última la única que tiene un efecto jurídico equivalente al de una firma manuscrita. Un documento firmado con un certificado cualificado ACA será considerado “firma electrónica cualificada” produciendo el mismo efecto que si hubiera sido firmado con firma manuscrita tradicional y será reconocida, gracias al nuevo reglamento, directamente en toda Europa.