29 marzo 2022
Pedro Comín: “Las sanciones económicas contra Rusia son efectivas”
Las sanciones internacionales contra los oligarcas rusos son muy efectivas, pero su aplicación es complicada. Sobre ello nos habla Pedro Comín, el director del SEPBLAC (Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias), que colabora vigilando cómo se aplican y ayudando en la localización de los bienes.
Comín es uno de los ponentes de las VIII Jornadas sobre Prevención del blanqueo de capitales que se celebran en Castellón los días 7 y 8 de abril .
La UE ya ha tomado medidas contra los oligarcas rusos por la guerra en Ucrania. ¿Son eficaces?
En una economía globalizada, estas sanciones son muy efectivas porque expulsan y aíslan de los beneficios de la internacionalización a las personas y al estado al que van dirigidas. Además de la congelación o bloqueo de bienes, existen muchas otras para impedir o limitar determinadas transacciones económicas. Su graduación depende de la intensidad del problema. Estamos viendo cómo conforme se agrava la situación en Ucrania se amplían las personas incluidas en listas.
Dicho la anterior, ni son fáciles de aplicar ni son inocuas para los estados que las dictan. La identificación de los bienes y sociedades controlados por las personas que están en las listas requiere conocer su titularidad real, lo que muchas veces pasa por desentrañar estructuras complejas. La supervisión de la correcta aplicación de estas medidas es una de nuestras funciones. También colaboramos con las autoridades competentes en la localización de esos bienes mediante los procesos habituales de generación y difusión de inteligencia financiera.
¿Cómo fortalecer la cooperación internacional?
El blanqueo de capitales tiene una dimensión internacional muy importante. Con independencia de donde se genere la actividad ilícita, la ocultación de los activos utiliza a menudo los sistemas de intercambio de la economía “legal” entre países. En los dos últimos años se han establecido colegios para coordinar a los supervisores de los sujetos obligados con presencia en tres o más países de la Unión Europea. En un futuro próximo esta coordinación pasará por una legislación más homogénea y una autoridad europea que tendrá la supervisión directa de las entidades de dimensión internacional y mayor riesgo.
También es relevante el intercambio de peticiones de información entre las unidades de inteligencia financiera. Actualmente estamos interconectados con 167 países y los intercambios, han aumentado de forma muy significativa.
Uno de los temas que se abordará en las Jornadas de Castellón son las criptodivisas. ¿Pueden contribuir al blanqueo de capitales?
El anonimato es una característica intrínseca de los criptoactivos y ya están siendo utilizados para el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. Los proveedores de estos servicios han sido recientemente incluidos entre los sujetos obligados al cumplimiento de la Ley de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo, por lo que tendrán, por ejemplo, que identificar correctamente a sus clientes y aplicar el resto de las medidas de diligencia debida. Para nosotros, es un reto trabajar con estos nuevos sujetos obligados.
Además de todo esto, ¿cuáles son las principales líneas de trabajo del SEPBLAC?
La fundamental es estrechar la colaboración con todos los actores, públicos y privados, que participan en la prevención. Es imprescindible para que el sistema sea efectivo. En inteligencia financiera, se concreta en un nuevo sistema de valoración de las comunicaciones por indicio. El objetivo es transmitir un mensaje claro a los sujetos obligados sobre la relevancia y calidad de la información que envían. En el área de supervisión, la colaboración se está desarrollando gracias a la actualización de los convenios con los supervisores prudenciales, que han dado lugar a la elaboración de un plan de inspección conjunto para este año.