Un inspector de Policía consigue el Premio de Microrrelatos en el mes de mayo

Javier de Pedro Peinado, inspector jefe de la Policía Nacional, ha sido el último ganador de la V Edición del concurso de Microrrelatos de Abogados, correspondiente a mayo. Su relato, `Mi cliente´, ha convencido al jurado y se ha hecho con el premio de 500 euros además de optar al premio anual de 3.000.

Javier, de 39 años, casado y con dos hijos, es abogado no ejerciente y trabaja desde hace 12 años en Murcia, colaborando con el Colegio de Abogados de la capital y lleva participando en el concurso desde hace más de dos años. Supo de la existencia de él por otro colega de profesión que hace poco desistió de participar en el concurso, tras no ser seleccionado en ninguna ocasión. Y no es el único concurso en el que participa, aunque confiesa que intenta escribir historias más largas, como novela policial.

El último ganador del V Concurso de Microrrelatos sobre Abogados explicó al recibir la noticia que “una de las palabras obligatorias, aguja, le inspiró la historia final”. Así surgió el relato ganador de este premio mensual. Además, confesó que su idea surgió tras “conocer algún abogado que tiene hermanos mayores delincuentes y quise así transmitir cómo la vida no nos trata por igual a todos”. El ganador tenía la historia del yonqui, hermano mayor de abogado, escrita y la dejó reposar hasta el último día del mes de mayo, tan solo unos minutos antes de que finalizara el plazo de presentación.

Cerca de 500 relatos han llegado de todas partes del mundo, con un 65% de participación masculina y un 35% femenina. Del total de relatos recibidos, el 18% proceden de la Comunidad de Madrid, seguida de Cataluña con un 15% y de Iberoamérica con un 9% del total.

El relato premiado y otros seleccionados por el jurado de entre los recibidos en el mes de mayo pueden leerse en www.abogacia.es y www.mutualidadabogacia.com, dentro del microsite dedicado a este concurso que albergan ambas páginas web. En el mes de junio, las palabras obligatorias son lucro, embargo, persecución, espejo y bebe.

Relato Ganador:

Mi Cliente

Mi cliente es un pobre yonqui. Su deterioro es tan profundo que temo que no sea capaz de llegar al juicio. Llevaba sin verle mucho tiempo, hasta que hace un par de semanas vino por el despacho a pedirme ayuda y se llevó escondido bajo su sucia camiseta mi pisapapeles de plata. Incoherente y torpe, es como un zombi que apenas piensa en otra cosa que no sea la aguja y cuando sonríe con su boca desdentada transmite la sensación de desamparo más profunda que pueda imaginarse. Impresiona verle allí sentado, tan escuálido, con su indumentaria ecléctica, mirando nervioso su relojito rojo de pulsera. La sala de lo civil está vacía; no suelen ser populares las vistas de tutela. Sonríe y me guiña un ojo, en un gesto que solía resultarme tranquilizador hace mucho tiempo, cuando ese tipo triste y derrotado aún era mi hermano mayor.