Blog de Comunicación y Marketing Jurídicos
26 febrero 2024
El abogado consciente, algo en lo que creer #forlawyers
Por Cristina Ruiz
La sostenibilidad no es sino una filosofía de vida, de comportamiento, y de pensamiento. La sostenibilidad va más allá de lo que los gobiernos o los demás pueden, deben, o quieran hacer; la sostenibilidad va de cada uno. Va de cada uno hacia un propósito común compartido, el del bienestar en un mundo mejor, con el foco en las personas. La sostenibilidad es “algo” en lo que creer.
He participado en charlas diversas, y no solo cobran vida los conocidos negacionistas del cambio climático –no entraré en nada de esto-, también aparecen los negacionistas de la Agenda 2030, que la tachan sencillamente de oportunista –tampoco entraré en esto-. Lo cierto, lo absolutamente cierto, es que tenemos que proyectar una nueva mirada a nuestro presente para nuestro futuro, como humanidad, como sociedad, como personas. Y la abogacía, precisamente, en esta nueva mirada transformadora y en la transición hasta alcanzar la misma, tiene un papel esencial que desarrollar desde el liderazgo de la profesión.
Tal vez una primera reflexión en relación al nuevo paradigma en el que estamos incursos nos lleva a preguntarnos sobre las paradojas nuevas a las que nos enfrentamos, como sociedad, y como profesionales de la abogacía: Tal vez un humanismo que quiere reaparecer y reinterpretarse, tal vez una ética que quiere dejar de estar en el tintero, tal vez la necesidad de generar un impacto en el entorno y en los demás que comienza a aflorar, tal vez una responsabilidad y un compromiso desde lo que somos como profesionales de la abogacía y la toma de consciencia de nuestra amplia capacidad de abanderar la creación valor desde nuestra profesión.
Así, el abogado consciente no es sino aquel que tiene esa capacidad de abanderar inspirando desde el ejemplo e influyendo desde la consciencia, sobre ese “algo” en lo que creer. El tomar consciencia nos permite cuestionarnos, nos permite hacernos preguntas constantemente.
Abramos, pues, conversaciones: ¿Te sientes parte de algo más grande? ¿Vas a tu aire?
El hombre como tal forma parte de un sistema: natural, social, y económico. Está inmerso en el mismo -quiera o no quiera-, y no es posible estar al margen. Por ello, debemos adquirir una nueva mentalidad sistémica desde la comprensión de nuestra naturaleza común y también de nuestro yo individual.
Una nueva mentalidad motivada e impulsada por un liderazgo consciente, ese que motiva e impulsa hacia un propósito común fundado en nuevas bases de proyección para el desarrollo social; y transformador, para lograr el cambio estructural que permita el progreso económico.
Hace unos días en Foro Ganivet –defensor de la libertad y la ética y conector del mundo cultural, el empresarial y el humano- escuché a mi querida @Susana Muñoz en una magnífica charla titulada “Liderazgo sostenible”, y hablaba de las 5 cualidades del liderazgo transformador en ese propósito común instrumentalizado a través de los ODS –Objetivos de Desarrollo Sostenible, de la Organización de las Naciones Unidas- :
• Intencionalidad. Esto es, de intención, de intención de servicio –los abogados estamos más que sobrados de esto-, sin embargo ¿hemos profundizado suficientemente en “esa” intención -en nuestro propósito-? Es más, ¿lo sabemos defender con la misma fuerza que defendemos a nuestros clientes? La intencionalidad implica un nivel de consciencia que conduce a un compromiso auténtico. ¿Cuál es tu propósito?
• Ambición. Implica ir más allá. Es una apuesta a nivel personal y profesional. Más allá de lo obligado, de lo regulado, más allá de lo establecido, más allá de la inmediatez, más allá en el tiempo. ¿Cuál es tu ambición?
• Consistencia / Coherencia. Mantener una visión clara, alineada en acciones, y perseverante en actitud. ¿Realmente te interesa? ¿Actúas en consecuencia?
• Colaboración. Implica que, si tienes un propósito genuino y una ambición sana, la manera de que algo se produzca, de que algo resuene es en alianza, en un movimiento compartido con personas que sienten, que piensan, que creen en lo mismo y de la misma manera que tú. ¿Te sientes ya parte de esa comunidad de intereses compartidos hacia un propósito común donde se es parte de un todo?
• Responsabilidad. Que no es más que, si uno no actúa consecuente y coherentemente, o se equivoca de camino o en el camino, sencillamente ha de asumir las consecuencias. Pero también responsabilidad es actuar con compromiso y con talante ante los acontecimientos adversos. ¿Cómo es tu compromiso? ¿Para qué?
Frente a estas cualidades está el actuar dejando que te lleve el viento, sin proyección, incongruentemente, de manera individualista, e inconsecuentemente. Para dar cabida a ese comportamiento se han acuñado términos como el conocido greenwhasing al que han seguido otros como ecoimpostura o tipowashing –digo que pongo a la persona en el centro, pero actúo de manera contraria-.
Y es que, en multitud de ocasiones hablamos sin saber de qué hablamos: ¿Qué es el liderazgo? ¿Qué es ser líder? ¿Qué es la sostenibilidad? ¿Qué es ser sostenible?
Y es que, en multitud de ocasiones nos preguntamos ¿Qué podemos hacer? Cuando la formulación, tal vez, sería ¿Qué debemos hacer?
El pensamiento crea y determina el lenguaje, pero el lenguaje revoluciona el pensamiento. El mensaje no es que los unos seamos mejores que los otros, sino que todos estamos llamados a contribuir, a crear valor como personas y a través de las personas, sustentado en el sentido de trascendencia. El Abogado Consciente es aquel que se pregunta cuál es el reto, y el que se pregunta cómo dar un paso más superando los límites preestablecidos.
Abramos, pues, conversaciones: ¿Qué huella quieres dejar? ¿Cuál va a ser tu legado?
Trascender significa sobresalir, pasar desde dentro hacia afuera, desde el ser al estar, extendiéndose –lo contrario es la inmanencia-. Trascender significa crear valor en las personas y generar un impacto positivo duradero en y para el mundo, a través de contribuciones significativas desde la persona, desde la profesión –desde la abogacía-. Lo que hacemos en la vida por los demás, es el legado que dejamos.
En el pasado Legal Forum Mangement tuvo la fortuna de escuchar al gran Xavier Marcet, me hizo pensar y reflexionar especialmente en una frase que dijo: “Transitar del propósito al legado”. Y decía que consiste en mantener el alma de aspirante, esto es vivir la montaña desde abajo, que es desde donde se necesita más ambición, pero desde la humildad, porque cuando has llegado a la cima, ya no hay más montaña a la que aspirar. El legado no es sino crecer desde dentro, haciendo crecer a las personas y a la sociedad, también desde dentro.
El legado intrínseco en los abogados es nuestra vocación con un firme propósito que es la más alta de las misiones humanistas: pedir justicia y defender las causas, pero, además, los abogados conscientes, asumimos cada uno, por añadidura, desde el convencimiento, la excelsa misión de contribuir a la construcción de un legado de confianza, por la posición que adoptemos o adoptamos ante la problemática actual y la respuesta que demos o damos ante los desafíos de futuro en este nuevo paradigma, y no por lo que hagamos o hacemos, sino por el para qué y el cómo lo hacemos. Porque creemos en ello.
Abramos, pues, conversaciones, lejos de las utopías, ya sabes, el liderazgo sostenible del abogado consciente va del legado de cada uno: ¿En qué crees tú?