El bufete digital: la transformación digital en los despachos de abogados

Por Javier Lorente
Linkedin: https://www.linkedin.com/in/javierlorente/

En la actualidad, cuando una persona tiene un problema legal, sobre todo los jóvenes, en la mayoría de las ocasiones no se dirigen directamente a las oficinas de un despacho de abogados, sino que realizan una consulta en internet, en primer lugar, sobre el problema que les atañe y, en segundo, para encontrar un abogado.

Como consecuencia de lo anterior, los abogados, sobre todo los más jóvenes, centran sus esfuerzos y recursos en darse a conocer digitalmente creando su “bufete digital”.

Búsqueda de abogados en la web

La búsqueda de abogados se está modernizando paulatinamente, pues sobre todo los más jóvenes buscan abogado en la red más que presencialmente, ya que haciéndolo de esta manera logran:

• Comodidad, pudiendo realizar la búsqueda a través de un smartphone desde su casa o lugar de trabajo.
• Mayor oferta de profesionales, pues pueden contactar más rápidamente con más profesionales.
• Mejor precio por los servicios jurídicos al poder contactar fácilmente con más abogados, disponiendo en consecuencia de más presupuestos de honorarios entre los que poder elegir.

La búsqueda de abogado en la web suele hacerse a través de:

• Páginas web de abogados o despachos concretos. En la mayoría de los casos los bufetes de abogados ofrecen una primera consulta gratuita que se limita a que el potencial cliente exponga brevemente su caso y el abogado le responda, también brevemente, sobre las vías legales a seguir y le ofrezca un presupuesto aproximado por su actuación.
• Páginas de captación de clientes para abogados. Estos directorios de abogados suelen ser páginas especializadas en posicionamiento online que, a través de páginas de terceros, publicación de artículos especializados etc., obtienen leads u oportunidades de potenciales clientes que reflejan en su propia web y a las que los abogados registrados pueden acceder, facilitándoles los datos de contacto de los potenciales clientes previo pago.

Este tipo de páginas tienen cuestiones favorables como, por ejemplo:

• Para los potenciales clientes, es beneficioso por la comodidad que supone plantear, de forma gratuita en la mayoría de los casos, su problema legal y que varios abogados contacten con él y le ofrezcan varios presupuestos entre los que podrá elegir, teniendo en cuenta para su elección el precio por sus servicios y la respuesta que le han proporcionado respecto de su consulta.
• Para los abogados registrados es beneficioso porque, sin tener que invertir tiempo y dinero en posicionamiento web, publicidad, etc., pueden acceder a la captación de potenciales clientes por un precio ajustado, si se opta por los planes básicos o intermedios ofertados por estas webs.

Sin embargo, este tipo de páginas de captación de clientes para abogados tiene también cuestiones perjudiciales, por ejemplo:

• Para los potenciales clientes, puede resultar agobiante que varios abogados contacten en un reducido periodo de tiempo con ellos, además del hecho de que estas páginas no priman la especialización, conocimientos o experiencia del abogado, sino que los datos del cliente los obtiene el abogado que primero paga por ellos.
• Para los abogados, los planes “premium” de estas páginas que ofrecen mayor obtención de oportunidades de potenciales clientes suelen ser caros y el hecho de que varios profesionales puedan contactar con el mismo potencial cliente hace que normalmente los precios por los servicios profesionales bajen bastante, dada la competencia.

El bufete

Un abogado joven que pretende iniciar su andadura profesional por cuenta propia se encuentra con varios inconvenientes, los principales, en la mayoría de los casos, la falta de recursos y la falta de clientes.

Esos dos inconvenientes crean la necesidad en el profesional de captar clientes invirtiendo lo menos posible, lo que en la mayoría de los casos se logra reduciendo costes fijos en despacho presencial y publicidad, sustituyéndolos por otras opciones más económicas.

El modelo de bufete para un abogado joven y con pocos recursos que pretende ejercer por su cuenta suele componerse de los siguientes elementos:

1. Página web: Concreta quién es, cuáles son sus especialidades, su experiencia, sus conocimientos, su procedimiento de trabajo, sus datos de contacto… Es importante no solo incluir información del despacho o bufete, sino también de cada uno de los integrantes del mismo así como sus especialidades. En la web de IENE Abogados podemos ver un buen ejemplo. En el apartado ¿Quiénes somos? del despacho hablan de manera resumida sobre el bufete, con un enlace hacia una página dedicada a cada uno de los abogados y las especialidades de cada uno.

El abogado no vende un producto, sino que se vende a sí mismo, sus conocimientos, experiencia y capacidad para resolver el problema legal del cliente, por lo que resulta sumamente importante que en la web se haga referencia a todas estas cuestiones, aportando pruebas que ratifiquen sus capacidades, como resoluciones judiciales favorables logradas por el profesional, o los comentarios de otros clientes que se reflejen en la web o en el buscador. Todo ello crea confianza en los potenciales clientes.

2. Posicionamiento online: Resulta esencial que la página web tenga visibilidad en internet, esto se puede lograr a través de tres medios fundamentalmente: pagando directamente a Google u otros buscadores por posicionamiento; pagando a un profesional que logre ese posicionamiento; o creando ese posicionamiento a través de la redacción de artículos especializados en la web propia y en webs de terceros.

El perfil del abogado del que estamos hablando, por una cuestión de reducción de costes, optará por esta tercera vía que, además, es la más recomendable, pues de esta forma la visibilidad en la web se logrará por el abogado en base a sus conocimientos especializados en una materia, lo que crea confianza en los potenciales clientes, si bien supondrá una carga de trabajo importante para el profesional.

3. Redes sociales: El perfil en redes sociales aumenta la visibilidad de un despacho y enlazar artículos jurídicos especializados redactados por el propio abogado y subir videos explicativos de cuestiones jurídicas prácticas ayuda a mostrar los conocimientos especializados del profesional, siendo una muy buena vía para captar clientes, sobre todo entre los más jóvenes.

4. Lugar de reunión: No tener un despacho físico no implica que no sea necesario un lugar donde reunirse con los clientes, pues por mucho que la captación de los mismos se realice online, será necesario un lugar de reunión para preparar declaraciones, juicios, recibir documentación original, etc.

En la actualidad hay muchos lugares de “coworking”, creados incluso por colegios de abogados, donde se pueden alquilar despachos o salas de reuniones por horas a un precio reducido que solventan perfectamente esa necesidad de un lugar físico donde poder reunirse con los clientes.

Los elementos expuestos son los básicos de los que un abogado joven con pocos recursos que inicie su andadura profesional por cuenta propia debería disponer, pudiendo complementarlos con otros ya tratados como es una suscripción en una página de captación de clientes, lo que le proporcionará numerosas oportunidades de captar a potenciales clientes.

Javier Lorente
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