Estrategias para ser un abogad@ efectivo

Por Berta Santos

Por Berta Santos

La efectividad en el ejercicio de la abogacía se ha convertido en una necesidad clave para garantizar el equilibrio entre la vida personal y la vida laboral.

No obstante, en ocasiones la efectividad del abogad@ decae cuando se ve obligad@ a trabajar más allá de las horas de oficina. Es entonces cuando la satisfacción y la motivación sobre su vida profesional disminuye Así se refleja en el siguiente gráfico extraído del 2022 Legal trends report publicado por la consultora Clio, en el que la satisfacción sobre la vida profesional decae de un 74% a un 58%. Asímismo el hecho de trabajar fuera de horas de oficina supone disminuir la satisfacción en la relación con los clientes, pasando de un 91% a un 72%, en la gestión del tiempo y en el bienestar emocional y mental del abogad@ pasando de un 68% a un 51%.

*Fuente 2022 Legal trends report publicado por Clio

Todo ello se suma a la preferencia de l@s abogad@s a trabajar en días laborales. De esta forma, sólo un 80% prefiere trabajar los viernes y actualmente el 45% los trabaja, y lo mismo ocurre con los fines de semana: sólo el 10% de l@s abogad@s prefiere trabajar los sábados y la realidad es que el 42% trabaja en sábado y el 32% lo hace los domingos.

*Fuente 2022 Legal trends report publicado por Clio

Con estos datos, resulta difícil pensar que el abogad@ pueda rendir de manera efectiva trabajando todos los días de la semana, sobre todo si esto le causa insatisfacción o incide en su bienestar mental y emocional.

En este contexto cabría preguntarse, ¿y si el abogad@ no está siendo suficientemente efectivo porque acumula cansancio, está saturad@ y simplemente no puede serlo, y aún así se le sigue pidiendo que siga produciendo en detrimento de su bienestar?

Así, resulta importante diferenciar los conceptos de productividad y de eficacia. La productividad está vinculada al hecho de realizar una tarea en un período de tiempo. La eficacia requiere definir acciones encaminadas al realizar una tarea de la mejor forma y en el menor tiempo posible.

Por tanto, más allá de las técnicas que se puedan aplicar para ser una persona más efectiva, es importante destacar cómo incide la actitud del abogad@ en su trabajo, la cual viene determinada por su capacidad de mantener la motivación, la satisfacción y la ilusión, permitiéndole un equilibrio entre su vida personal y profesional, que pueda facilitarle el cansancio que necesita y evitar el “burn out” o el mantenimiento continuado de situaciones de estrés, que en nada benefician al cuidado de su salud mental, física y emocional.

En este sentido, si una persona acumula cansancio, desmotivación, hartazgo, no va a obtener resultado alguno aplicando técnicas de gestión del tiempo, porque no es tanto una cuestión de no saber manejar su tiempo, sino el hecho que su bienestar se está viendo afectado, por prácticas laborales generadas por situaciones externas, o por la propia persona, que están destruyendo su bienestar.

A este respecto, una de las claves para dar solución a este tema es ser conscientes que el ejercicio de la abogacía está demandando un cambio, en la forma en la que el abogad@ desarrolla su trabajo, lo cual implica la incorporación de la tecnología y la simplificación de procesos en el rol del abogad@.

Para ello, la efectividad del abogad@ no es algo que concierne únicamente a la persona del abogad@, sino también a los despachos con la definición de nuevas estrategias en la organización del trabajo del abogad@. En este sentido, las asesorías jurídicas de las empresas están incorporando posiciones de “legal operations”, que son personas con experiencia en el ejercicio de la abogacía, encargadas de pensar y ayudar a los abogad@s a mejorar su eficiencia, con la incorporación de procesos para hacer más efectivo su trabajo.

Además de todo ello, resulta importante posibilitar la flexibilidad en el trabajo del abogad@, para tomar decisiones sobre la distribución del tiempo en su trabajo, por cuanto es algo demandado por el 76% de los abogad@s encuestados, tal y como puede observarse en la siguiente comparativa.

*Fuente 2022 Legal trends report publicado por Clio

En consecuencia, la efectividad del abogad@ depende de múltiples factores externos e internos. Los factores externos son difícilmente controlables si el despacho no vela por la efectividad y el cuidado del bienestar de sus abogad@s, y en lo que se refiere a los factores internos, resulta importante cuestionarse cómo está afectando el trabajo al propio bienestar, profundizar en ello y tomar medidas, que pueden implicar la realización de un cambio drástico en el estilo de vida, con el fin de poder aumentar el bienestar y mejorar la salud en el ejercicio de la profesión.