Seguramente seguro

 Por Iñigo Jiménez

¿Quien no ha pasado por la terrible experiencia de que, después de desembolsar una importante cantidad para tener un dispositivo móvil a la última, este, en el momento más oportuno, se nos caiga, ocasionando la rotura de la pantalla, abolladura en el marco o un arañazo?

Aquí seguramente y después de ver los costes de reparación de algunos dispositivos es cuando nos planteamos el aseguramiento de los terminales.

La mayoría de las compañías telefónicas ofrecen un servicio de aseguramiento de los terminales, pero, ¿qué suelen cubrir dichos seguros?

QUÉ SUELEN CUBRIR

• Todos los terminales suelen tener dos garantías:
• • GARANTÍA LEGAL: Según el RD 1/2007 el vendedor durante los 2 primeros años se tiene que hacer cargo de las averías que pueda tener el terminal siempre que estas no se deban al mal uso del mismo. Además hay que tener en cuenta que en los 6 primeros meses si aparece un fallo o desperfecto se asume que dicho defecto venía de fábrica y el vendedor deberá demostrar que no fue así y a partir de esos 6 meses hasta los 2 años un perito deberá decidir si el fallo ha sido ocasionado por un mal uso del terminal o por un defecto de fabricación.
• • GARANTÍA COMERCIAL: es una ampliación de la garantía legal que puede proporcionar el vendedor del terminal.
• El robo con fuerza o intimidación del terminal. Normalmente las compañías nos van a ofrecer un terminal de características similares o mayores al terminal sustraído.

• Uso fraudulento del terminal. Normalmente suelen establecer un límite de la cantidad que nos van a abonar.
• Rotura de pantalla.
• Derrames de líquidos.

QUÉ NO SUELEN CUBRIR

• Si te quitan el móvil en un descuido no es robo, es hurto, por lo que las compañías no se suelen hacer cargo.
• Daños causados por la lluvia o por la exposición prolongada al sol.
• Arañazos y golpes.

Nuestra recomendación es que antes de contratar un seguro para tu dispositivo:

• Lee detenidamente la letra pequeña para tener claro qué es lo que te va a cubrir dicho seguro y qué es lo que no.

• Comprueba el número máximo de partes que puedes presentar al año.

• Y por último, y este punto creo que es el más importante, haz un balance entre lo que vas a pagar periódicamente y el coste que ha supuesto el terminal. ¿Estarías dispuesto a pagar al año 7.000€ por un coche que te costó 15.000€?

Pon en una balanza todo lo que te ofrecen las diferentes compañías y saca tus propias conclusiones de si te merece la pena o no contratar un seguro para tu móvil.