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Innovación Legal
27 abril 2017
Por Iñigo Jiménez, experto en movilidad de RedAbogacía
Hoy en día gracias a las redes sociales y a los dispositivos móviles disponemos de información actualizada en cualquier momento y en cualquier lugar.
Pero tenemos que tener mucho cuidado con la información que circula, pues no todas las noticias que aparecen son todo del todo ciertas.
Deberíamos contrastar siempre dichas noticias para asegurarnos de que la información es real y no crearnos falsas alarmas.
Bulos siempre ha habido, pero ahora con la facilidad de las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea estos se extienden con una gran rapidez.
1.- Para obtener dinero: cuanto más viral sea una noticia, más tráfico tendrá la página desde la que se ha originado el bulo por lo que más ganancias podrá obtener el creador de dicha noticia.
2.- Para crear alarma social: incluso se suelen crear para hundir la reputación tanto de empresas como de individuos.
3.- Por razones ideológicas: para alterar el orden social y político y así obtener rendimientos políticos. Muchas veces incluso se llegan a usar noticias reales pero sacadas de contexto e incluso adornándola con falsos detalles para hacerlas parecer aún más reales. Es lo que se ha denominado posverdad o mentira emotiva: https://es.wikipedia.org/wiki/Posverdad
Los grandes medios (Google, Facebook, etc.) e incluso algunos gobiernos, ya han empezado a tomar medidas para evitar en la mayoría de lo posible el que circulen dicho tipo de noticias falsas, pero como bien cantaba Raffaela Carrá hay que tener mucho cuidado con los rumore, rumore, rumore y si tomas las medidas mínimas, estos no se distribuirán tan fácilmente como lo están haciendo ahora.