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ANIVERSARIO
Tres presidentes,
historia viva de la Abogacía
Ilustraciones_Arturo Asensio
Eugenio Gay
(1993-2001) EL PACTO QUE NO SOBREVIVIÓ
Bajo su mandato, se consiguió llegar al tan anhelado
Pacto de Estado por la Justicia, aunque no fuera efecti-
vo, algo que ahora parece imposible, a pesar de los in-
tentos del Consejo de la Abogacía por renovarlo. ¿Qué
hubo entonces que falta ahora para que todos los parti-
dos políticos se pusieran de acuerdo?
Ciertamente no fue un proceso nada sencillo. En primer lu-
gar, organizamos una serie de conferencias sobre la conve-
niencia del pacto en el que participaron importantes líderes
de los partidos políticos y, después de ello, convocamos en
varias reuniones a todos los profesionales que intervenimos
en la Justicia, Consejo General de la Abogacia, Consejo
General de los Procuradores de los Tribunales de España,
Consejo General del Poder Judicial, las tres Asociaciones
Profesionales que entonces existían de la Magistratura, las
de la Fiscalía, así como la representación de los secretarios
judiciales junto a representantes del propio Ministerio de
Justicia. Fueron numerosas las reuniones que se tuvieron
en el Consejo hasta que se firmó el Pacto el 31 de mayo
de 2001. Fue un verdadero éxito en aquél momento. En
el punto 20 del Pacto de Estado relativo a los abogados se
preveía de manera explícita la aprobación de un nuevo Es-
tatuto de la Abogacía, así como la aprobación de una Ley
de Acceso a la profesión. El Real Decreto 658/2001 de 22
de Junio aprobaba el Estatuto General de la Abogacía Espa-
ñola, y empezaba así su preámbulo: “El pasado 31 de mayo
se suscribió el Pacto de Estado para la reforma de la Justicia
con el fin de abordar una modernización íntegra de nuestro
sistema judicial. Impulsando un nuevo modelo de justicia
global y estable que garantice con rapidez, eficacia y ca-
lidad los derechos de los ciudadanos. Los abogados deben
jugar en este proceso un papel esencial.” Desgraciadamente
la Ley de Acceso tardaría aún años en ver la luz.
Creo que el Pacto no siguió adelante porque, a pesar de
estar todos de acuerdo en ello, los partidos políticos priori-
zaron, lamentablemente, sus intereses partidistas sobre los
intereses generales del Estado y porque no hubo una con-
tinuidad de aquellas reuniones que, en la sede de nuestro
Consejo, llegaron a buen fin.
14 _ Abogacía Española _ Julio 2018
Su presidencia se caracterizó, entre otras cosas, por
una clara vocación europea. ¿Cuál es el futuro de la
Abogacía en Europa y qué cosas quedan por hacer?
Sin duda, Europa no es solo la Casa Común de todos no-
sotros sino que se ha convertido en una realidad jurídica
omnipresente que condiciona los ordenamientos jurídicos
de nuestros países. Pero, además, Europa es una necesidad
para los retos que vamos a tener que afrontar en una econo-
mía y un mundo totalmente globalizados. Europa, vista en
el mapa general del mundo, es una península del continente
asiático. Por ello nuestra presencia en Europa resulta nece-
saria y fundamental, y la Abogacía debe situarse entre los
actores más presentes.
En 1996 se aprobó la actual Ley de Asistencia Jurídica
Gratuita. ¿Qué significó para la Abogacía?
Significó un paso fundamental en el que la Abogacía ins-
titucional tuvo un papel importantísimo y no fácil en su
elaboración. Las conclusiones del Congreso Nacional de La
Coruña de 1995 resultaron definitivas para convencer al
poder legislativo de su conveniencia. l